Las personas que comen frutos secos, como almendras o nueces, pueden ser hasta un 46% menos propensas a padecer obesidad que aquellas que no lo hacen, según un estudio estadounidense, recogido por la Agencia Reuters.
Además, las personas que comen más frutos secos son también menos propensas a padecer síndrome metabólico , que está vinculado con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca y diabetes, recoge el estudio.
ConSalud.es, Enero 2014
«Este es otro estudio que muestra que existe una asociación entre el consumo de frutos secos y de no ser obesos y tener menos tendencia a padecer el síndrome metabólico», ha señalado el autor principal del estudio, el doctor Joan Sabaté, de la Universidad de Loma Linda en California (Estados Unidos).
Y es que los frutos secos son ricos en grasas insaturadas y su alto contenido en proteínas también puede conducir a la gente a sentirse más llena y a comer menos alimentos poco saludables.
Para el nuevo estudio, los investigadores utilizaron datos de las dietas de 803 hombres y mujeres y vieron que, por cada porción de una onza de nueces consumidas por semana, el riesgo de padecer el síndrome metabólico de una persona se redujo en un 7%.
«Los frutos secos son una elección de alimentos saludables si se consumen en cantidades razonables «, ha señalado Jeffrey Blumberg , profesor de Nutrición de la Universidad Tufts en Boston (Estados Unidos).
La investigación, publicada en PLoS ONE, fue financiada en parte por una subvención de la Fundación del Consejo Internacional de los Frutos Secos Investigación y Educación sobre Nutrición.