- El célebre cocinero y el prestigioso cardiólogo piden que esta materia sea una asignatura obligatoria en las escuelas y que España se convierta en líder mundial.
El cocinero Ferran Adrià y el cardiólogo Valentín Fuster abogaron el viernes por que España se convierta en líder mundial en educación alimentaria, como ya lo es en la alta cocina, y pidieron que sea una asignatura obligatoria en las escuelas.
«Les pido que digan a sus gobiernos que introduzcan en las escuelas algo que hacemos tres horas al día: alimentarnos»,dijo Adriá.
Adrià y Fuster asistieron a uno de los actos de clausura del Curso de Cardiología Intervencionista EuroPCR para presentar la Fundación Alícia, dedicada a la ciencia y a la alimentación, en el que defendieron que «una buena alimentación» puede mejorar la calidad de vida.
Adrià aseguró que el «sueño» de la Fundación Alicia es que la alimentación sea «una disciplina obligatoria» en todos los colegios y remarcó que, si no existe una educación desde la infancia, «no sirve de nada». «Si un niño no diferencia entre un espárrago blanco y uno verde, no se puede prevenir», señaló, argumentando que «no se entiende» que no exista una asignatura de alimentación.
El cocinero catalán abogó por buscar soluciones para arreglar «la epidemia de obesidad» y afirmó que existen estudios que sostienen que los estados no podrán hacer frente a su coste económico.
Añadió que «comer bien y comer sano son dos cosas diferentes», pero sostuvo que no se pueden mantener discursos de que «todo es malo», sino proponer soluciones pragmáticas para cambiar las tendencias alimentarias. Por ello, abogó que la ciencia entre en la cocina ya que «sirve para mejorar en un 99% de los casos».
Por su parte, Valentín Fuster subrayó la necesidad de enseñar a los niños que la alimentación es una prioridad para la salud y dijo que el hecho de que no haya tiempo para inculcar la salud como prioridad «es un problema que viene de arriba», de las administraciones.
El cardiólogo aseguró que la gente necesita mensajes sencillos que promocionen la salud y recordó que hay seis factores de riesgo que pueden dar lugar a un infarto de miocardio o a un accidente cerebral. Dos de ellos son físicos: la hipertensión y la obesidad; dos son químicos: el colesterol y la glucosa, y los dos últimos dependen de si se fuma y si se hace ejercicio.
«Si a los 50 años no se reúne ninguno de estos factores, la posibilidad de un infarto en los próximos 10 años es de 1%, si se tienen tres, el riesgo sube al 20%», afirmó.
Finalmente, para aclarar cierta «confusión» generalizada, que para adelgazar «uno tiene que comer menos, para bajar el colesterol hay que tomar alimentos bajos en grasas y para tener una buena salud es necesario comer alimentos con color». También añadió que la buena alimentación tiene que ir acompañada ejercicio físico.