Las plantas medicinales son una magnífica ayuda para perder peso

Glucomanano, té verde, garcinia, fucus, alcachofa y otras muchas plantas… nos ayudan a combatir esos antiestéticos michelines. Cuando llega el buen tiempo adelgazar se convierte en nuestro objetivo prioritario. Saber las propiedades de estas y otras plantas aliadas a la hora de combatir los kilos de más, nos servirá y mucho. De ese modo podremos elegir la que mejor se adapte a nuestra situación en concreto.

En este sentido es importante conocer los datos de una encuesta sobre la percepción del sobrepeso y las plantas medicinales elaborada por INFITO (Centro de Investigación sobre Fitoterapia). Por otra parte también se ha presentado un manual sobre plantas medicinales para el sobrepeso, que se distribuirá de forma gratuita a los profesionales de la salud, para que ellos también manejen esta información. En este libro se incluyen consejos de dieta y ejercicio en los que han colaborado los doctores Miguel Ángel Rubio, de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, y Jesús Román, presidente de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA).

La encuesta refleja que muchos españoles tienen -tenemos- previsto perder peso este año y una parte de ellos recurrirá a las plantas medicinales para lograrlo. En el libro, por su parte, se revisan los últimos estudios sobre las plantas medicinales que han demostrado su eficacia en el sobrepeso, como el té verde o el glucomanano, que comentábamos antes.

Esta interesante información se ha presentado en una reciente rueda de prensa celebrada el pasado martes 14 de abril en el hotel High Tech President (Marqués de Villamagna, 4, Madrid) en la que han estado presentes los profesores Concha Navarro, catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada y presidenta de INFITO (a la izquierda, en la fotografía); Teresa Ortega, profesora de Farmacología de la Universidad Complutense y vicepresidenta de INFITO; y Jesús Román, presidente de SEDCA (a la derecha en la fotografía, junto a Concha Navarro).

No hay plantas milagrosas…

«Las plantas medicinales -afirma Teresa Ortega, a la izquierda en la fotografía- no podrán ser eficaces al cien por cien si no se acompañan con una dieta y el ejercicio físico», lógicamente no hay plantas milagrosas, sin una dieta más baja en calorías y la actividad física adecuada. «Además hay distintos grupos de plantas, con distintos tipos de acción. No podemos decir que la planta ´fulanita`sirve para todo. Además el sobrepeso no siempre tiene el mismo origen» mantiene la vicepresidentea de INFITO. En este sentido las plantas van a ser eficacez si nos las aconsejan de forma adecuada: un médico o un farmacéutico, que son las personas indicadas para hacerlo, algo que en Nutriguia.com repetimos siempre.

Teresa nos contaba que las plantas que contienen mucílagos -una fibra soluble- al ser ingeridas con agua, aumentan el volumen y por tanto dan sensación de saciedad. Otras como el glucomanano y el fucus, reducen la absorción de ciertas grasas, «ejercen un efecto barrera en el aparato digestivo». Al pasar por el intestino grueso suavizan y favorecen el vaciado intestinal. Otras inhiben el apetito, como es el caso de la hoodia y el citrus, continúa contándonos la experta. «Otras ejercen un efecto lipolítico, es el caso de las plantas que contienen catequinas como el té, el guaraná y el mate. En definitiva cada planta tiene una forma de actuar.

Dieta y ejercicio

Por su parte el profesor Jesús Román, presidente de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) nos explicaba que el 20 por ciento de la población no consigue ponerse en forma porque faltan dos ´patas` fundamentales: dieta y ejercicio. «El ciudadano debe entender -nos explicaba- que el sobrepeso es igual a la cuenta de su banco: le metemos mucho más de lo que sacamos.» Por tanto la dieta debe ser suficiente, variada, equilibrada y debemos aumentar la actividad física (sólo así sacaremos más de lo que metemos). El problema es que algunos llevan haciendo dieta mal hechas toda su vida, como nos contaba el profesor Román, la que le ha pasado su vecina, la que le ha puesto un médico y sólo ha hecho una semana y después otra… Cada vez más la gente joven hace dieta por su cuenta, a veces dejan de comer o hacen lo que le ha recomendado su compañero de clase… Eso da idea de la preocupación que tienen muchos jóvenes… Con la ayuda de todos podemos contribuir a que el sobrepeso se controle.

Adelgazar de forma eficaz y segura

Según una revisión de estudios elaborada por INFITO, el glucomanano, el té verde y la garcinia nos ayudan a conseguirlo.

Saciar el apetito y actuar sobre las grasas son algunos de los efectos de los preparados de plantas medicinales de dispensación farmacéutica
Ensayos clínicos avalan la eficacia de diversas plantas medicinales en el tratamiento del sobrepeso como refuerzo de la dieta y el ejercicio

Sí las tres anteriormente citadas, el glucomanano, el té verde y la garcinia son algunas de las plantas medicinales de dispensación farmacéutica que han demostrado mayor eficacia y seguridad en el tratamiento del sobrepeso, como recoge la revisión monográfica «Plantas medicinales para el tratamiento del sobrepeso», editado por el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) con la colaboración de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA). Este manual, disponible de manera gratuita para los profesionales de la salud, reúne una serie de ensayos clínicos que avalan las propiedades de diferentes tipos de plantas que ayudan a perder peso junto con dieta y ejercicio. También se incluyen recomendaciones dietéticas y de hábitos de vida elaboradas por los doctores Miguel Ángel Rubio, de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, y Jesús Román, presidente de la SEDCA.

«Las plantas medicinales de dispensación farmacéutica cuentan con un registro sanitario que garantiza su eficacia y seguridad. Acompañadas de dieta y ejercicio pueden lograr una pérdida moderada pero constante de esos kilos de más y de una manera saludable», explica el profesor Román.

En el libro se recogen las diferentes tipos de plantas medicinales indicadas en el tratamiento coadyuvante del sobrepeso, como las lipolíticas, que reducen la absorción de la grasa, como la garcinia; otras actúan a través de la termogénesis o temperatura corporal, como el té verde; las hay saciantes, como el glucomanano; reductoras del apetito, como el naranjo amargo o citrus; y preparados destinados a mejorar la función hepatobiliar y digestiva, como la alcachofa, entre otras. “Según las necesidades de cada persona, el farmacéutico recomendará el uso de una u otra planta”, explica una de las coordinadoras del libro, la profesora Concha Navarro, catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada y presidenta de INFITO, “ya que, debido a su formación académica, es el profesional mejor preparado para aconsejar qué preparados son más adecuados para cada tipo de sobrepeso, y derivar al médico en caso de obesidad o patologías asociadas”.

En cuanto a los posibles efectos adversos, una de las preguntas formuladas durante la presentación del estudio y del libro, Concha Navarro afirmó que «no hay referencias de efectos adversos ni interacciones. Hay que mantener ciertas precauciones en las que tienen mucílagos, en el caso de tomar determinados medicamentos convendría distanciar su ingesta 1 hora. En algunas plantas medicinales sí convendría tener periodos de descanso, si se emplean en tiempos largos». La eficacia sólo se consigue con las tres patas: dieta, ejercicio y plantas medicinales.

Plantas con actividad termogénica

Té verde: que ayuda a la combustión de las grasas. Está indicado para perder peso por estimular la actividad termogénica, y por tanto la combustión de las grasas, propiedad que también tienen dos plantas estimulantes, el mate y el guaraná, señala la otra coordinadora del libro, Teresa Ortega, profesora de Farmacología de la Universidad Complutense y vicepresidenta de INFITO. Según se recoge en los estudios analizados por INFITO, el uso habitual de preparados de té verde estandarizados ayuda a reducir el colesterol LDL (el malo), los triglicéridos y el cociente LDL/HDL. Sus compuestos vegetales han demostrado que podrían ayudar a prevenir la aparición de ciertos tipos de cáncer y la enfermedad coronaria.

Los componentes mayoritarios del té verde (sus hojas, a la izquierda en las fotografías inferiores) reducen la acumulación de ácidos grasos libres, colesterol, glucosa, insulina y leptina, entre otros. A las catequinas, uno de sus activos más importante, varios estudios le atribuyen un aumento importante de la termogénesis, niveles que se alcanzan con la administración de cafeína pero a niveles muy elevados. Estas propiedades ayudan a perder peso y se centran en la grasa abdominal y subcutánea. “Otra de las ventajas que aporta el uso de esta planta es el hecho de que no produce diarreas puesto que las grasas que no son absorbidas no pasan por el proceso de emulsión”, asegura Teresa Ortega.
Por vía oral está indicado como coadyudane en regímenes de adelgazamiento, en el tratamiento de diarreas ligeras y para favorecer la eliminación renal de agua. Por vía tópica se utiliza como anticelulítico, antipruriginoso en afecciones cutáneas y como protector de grietas y desolladuras.
La dosis adecuada en caso de sobrepeso es de 1.400 mg/día, repartido en desayuno y comida, durante un período de 3 meses.

Mate: un arbusto o árbol de hasta 20 m de alto que crece en América del Sur (Paraguay, Brasil, Argentina). Sus hojas (abajo, en la fotografía del centro) se emplean para hacer infusiones y con fines medicinales. Es rico en ácidos fenólicos y flavonoides; y también en cafeína, teobromina y teofilina. Por su contenido en cafeína se usa para hacer bebiddas estimulantes. Se utiliza frente al agotamiento físico y mental y para favorecer la eliminación renal de agua. Y también en el tratamiento del sobrepeso. Se aconsejan 3 g/día de droga pulverizada.

Guaraná: es originaria de América del Sur. Es una liana tropical con flores de racimo (abajo, en la fotografía de la derecha). Se utilizan las semillas, que están dentro de pequeños frutos rojos coomo cápsulas. Las semillas se machacan y mezclan con agua (pasta de guaraná). Dicha pasta tiene olor similar al chocolate y sabor astringente y amargo. Contiene cafeína y trazas de teofilina y teobromina. También tiene almidón, proteínas, compuestos polifenólicos, catequina y epicatequina, taninos, resina y saponósidos. Está indicada como coadyuvante en el tratamiento de la obesidad, astenias y diarreas leves. Se aconseja una dosis de 0,5/2 g/día de droga pulverizada o una decocción al 3 por ciento, dos tazas/día.

Plantas saciantes y disminuidoras de la absorción

Glucomanano: por su parte, es una fibra que, al ser ingerido con una cantidad considerable de agua, se hincha en el tubo digestivo, lo que genera sensación de saciedad. Numerosos estudios han constatado la eficacia del glucomanano en el tratamiento del sobrepeso, el estreñimiento, la hiperglucemia y la hipercolesterolemia. La mayoría de sus actividades están relacionadas con su capacidad de absorber agua, lo que le permite aumentar hasta 100 veces de tamaño cuando entra en contacto con este líquido, transformándose en un gel viscoso no digerible. Además, el glucomanano se usa en alimentación como fibra soluble desde hace dos décadas (en países occidentales).

También se cree que el glucomanano (a la izquierda, en las fotografías de abajo) podría producir una disminución en la abosrción de glucosa, además actúa sobre el control de la colesterolemia y los niveles de LDL-colesterol, así como sobre la trigliceridemia, ya que interfiere en la absorción de los mismos.
“Los especialistas aconsejan tomar entre 3 y 4 gramos al día para reducir el exceso de peso en personas con sobrepeso”, afirma la profesora Ortega. En Japón se usa el glucomanano desde el siglo IX como alimento.

Plantago: en especial en la especie Ispaquia, que es la que más se emplea, cuyas semillas también poseen una alta concentración de mucílagos (20-30%). Y también los de la especie Zaragatona con un 10-12 por ciento de mucílagos. Como en el caso del glucomanano, ambas semillas se hiinchan en contacto con el agua formando un gel viscoso y voluminoso. De ese modo ejerce también un efecto saciante y regulador intestinal. Además retardan la absorción de algunos nutrientes. Por tal motivo son los laxantes más utilizados actualmente. Numerosos estudios clínicos demuestran su eficacia tanto en el tratamiento del estreñimiento crónico como en el caso del colon irritable. Está indicado como coadyuvante en las dietas de adelgazamiento, ya que es saciante y además disminuye la absorción de carbohidratos y lípidos. Como laxante se aconseja una dosis de 7-30 g de semillas al día o preparados equivalentes, administrados con la necesaria cantidad de líquidos.

Fuco (fucus): son tallos desecados de distintas especies de algas pardas (abajo, fotografía del centro). En España se encuentran en aguas gallegas, y se recolectan en primavera y verano, en marea baja. Son ricas en carbohidratos, polisacáridos mucilaginosos. También contiene yodo, vitaminas, minerales, proteínas, lípidos, esteroles y polifenoles. Por sus propiedades gelificantes se emplea como aditivo alimentario. En terapéutica se utilizan como antirreumático, antiartritico y antiedematoso. Y en los últimos años como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Al igual que los anteriores el fucus, por su contenido en mucílagos, cuando se administra con suficiente cantidad de líquidos provoca sensación de saciedad y actúa como regulador intestinal, por lo que es un buen aliado para combatir el sobrepeso. Se aconseja una ingesta de entre 0,5 a 2 g/día de polvo criomolido de talo de fucus, repartido en tre tomas.

Judía (Phaseolus vulgaris): sus frutos o vainas se emplean con fines terapéuticos. Son ricas en carbohidratos (fibra insoluble y almidones). También poseen inositol y aminoácidos. Los extractos de la variedad blanca de judías se emplean como coadyuvanes en el tratamiento del sobrepeso. Se aconseja tomar una dosis de entre 600 y 1.500 mg junto con las principales comidas.

Gymnema: es una planta tropical de Asia y África, presente también en Australia y América Central (abajo, la fotografía de la derecha). Se conoce con el nombre de Gurmar que significa destructor de azúcar. Sus hojas tienen un efecto astringente, diurético y tónico; las raíces, propiedades eméticas y expectorantes. Hoy se le atribuyen propiedades hipoglucemiantes e hipocolesterolemiantes. Recientemente se ha descubierto su utilidad a la hora de combatir la obesidad por la acción de los ácidos gimnémicos para impedir la absorción de glucosa en el intestino. Esta propiedadd podría ayudar a disminuir el sobrepeso y la obesidad asociada a la diabetes tipo II. Forma parte de diversos preparados y se aconseja una dosis de 400-1.000 mg/día (con un contenido de un 24 % de ácido gimnémico).

Plantas inhibidoras de la lipogénesis

Garcinia cambogia: conocida como tamarindo malabar, originaria del sur de la India donde se empleaba como especia en enfermedades como hepatitis, laringitis, infecciones bucales y reumatismo. En la medicina ayurvédica se usa como purgante y favorecedora de la digestión. Está indicada en caso de sobrepeso y el mantenimiento de la pérdida ponderal. Se aconsejan 500-1.000 mg de extracto de Garcinia cambogia, repartido en 2-3 tomas y administrado entre 30 y 60 minutos antes de cada comida.

Plantas reductoras del apetito

Hoodia: que es una especie espinosa y cactiforme, que crece en zonas desérticas, originaria del desierto de Kalahari (África del Sur), donde las elevadas temperaturas permiten su floración (abajo, fotografía de la izquierda). Lo que se utilizan son sus tallos suculentos, algo que se ha hecho de forma secular por los habitantes de la zona (etnia khoisan) que la toman en sus desplazamientos de caza, con el objetivo de disminuir su necesidad de comer. Hoy es una especie protegida y solo puede ser recolectada con autorización, por compañías que pagan una licencia. Por ese motivo se está intentando su cultivo.

Se utiliza como supresora del apetito, tanto en extractos como pulverizada. Según los distintos fabricantes, se aconseja un consumo que va desde los 100 a los 3.000 mg/día. Por tanto se deben hacer estudios para establecer la dosis adecuada.

Naranjo amargo: es un árbol de pequeño tamaño, que se cultiva en la zona mediterráneas (abajo, fotografía de la derecha). Esta planta se emplea como ingrediente culinario y para hacer licores con fines medicinales, en el tratamiento de afecciones digestivas, como estimulante del apetito y de las secreciones gástricas, en contraste con su reciente empleo como coadyuvane en el tratamiento de sobrepeso y obesidad. Desde el punto de vista medicinal se emplean la flor desecada, la hoja desecadda y el pericarpio del fruto maduro. Este pericario o cáscara de naranjo amargo es el empleado en la elaboración de fitopreparados destinados a su uso como coadyuvantes en el tratamiento del sobrepeso y de la obesidad. Esta cáscara contiene abundantes polifenólicos, también compuestos nitrogenados y sinefrina. Los preparados elaborados con corteza de naranja amarga se emplean como coadyuvantes de los tratamientos de pérdida ponderal. Se aconsejan 1-2 cucharaditas , 1-3 veces al día, de decocción de pericarpio. En cápsulas, 85 mg de extracto de pericarpio (contenido de 5 mg de sinefrina): 2 cápsulas en el desayuno y dos en la comida.

Plantas con actividad diurética

Ortosifon: el té de Java (a la izquierda, en las fotografías inferiores) está constituido por las hojas y parte superior de los tallos de Ortosifón. Es originaria de Indonesia. Las flores son de color blanco o lila, con estambres alargados como un bigote, por eso se la conoce como «bigote de gato». Es rica en sales de potasio, diterpenos y abundantes compuestos fenólicos (fenoles y flavonoides) entre otros. Está indicada en procesos inflamatorios e infecciosos del aparato urinario, así como en caso de litiasis renal. Se aconsejan de 0,75-1,5 g/día de polvo criomolido de hojas, que puede subir a 2,25 g/día, en 2-3 tomas.

Cola de caballo: de ella se emplean sus partes aéreas y abunda en los suelos húmedos de Europa, Asia y América del Norte. Posee dos tipos de tallos: fértiles y estériles. Los tallos fértiles, no clorofílicos aparecen en primavera y presentan una espiga de forma oblonga. Los estériles se desarrollan más tarde, son huecos y con ramas acanaladas. Tienen hojas insertadas en los nudos. Algunos de sus tejidos están impregnados de sílice. El equiseto es rico en minerales, además posee ácido ascórbico, fitosteroles, fenoles y flavonoides. Está indicado, en uso interno, para favorecer la eliminación renal de agua en caso de afecciones inflamatorias renales y vesicales, y en cálculos renales de pequeño tamaño. Es coadyuvante en régimen de adelgazamiento, en especial si el exceso ponderal está acompañado de retención de líquidos (en el centro, en las fotografías inferiores).

En el uso externo: se emplea en heridas con mala cicatrización, forma también parte de formulaciones cosméticas destinadas a prevenir arrugas y en el tratamiento de la celulitis.

Plantas que mejoran la función hepatobiliar y la digestión

La alcachofa: es una planta indicada para el sobrepeso por sus propiedades depurativas (a la derecha, en las fotografías superiores). En concentraciones adecuadas también provoca la disminución de los lípidos en la sangre y es capaz de reducir los síntomas del síndrome de colon irritable. En fitoterapia se emplean las hojas y en ocasiones la raíz. Es rica en ácidos fenólicos, flavonoides, lactonas, taninos, enzimas y carbohidratos. Uno de sus componentes, la cinarina, está especialmente indicado para reducir el nivel de colesterol y eliminar kilos. Los voluntarios que se sometieron a un ensayo clínico con cinarina experimentaron una disminución del 20% de colesterol y perdieron, además, 5 kilos de media. La combinación de sus propiedades antioxidantes, que evitan la oxidación del LDL-colesterol, e hipocolesterolemiantes, hace de los preparados de alcachofa un fitomedicamento ideal en la prevención de la aterosclerosis y otras alteraciones cardiovasculares asociadas al sobrepeso”, afirma la profesora Concha Navarro.

Está indicada en dispepsias no ulcerosas, disfuncniones hepatobiliares, destoxificante hepático, hiperlipidemias, tratamiento preventivo de aterosclerosis y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso y en regímenes especiales. Se considera eficaz una dosis de 0,9-1,,35 g/día de hoja seca repartido en 3 tomas. Se utilizan las hojas pulverizadas, el zumo obtenido por presión a partir de hojas frescas y extractos obtenidos de ambos.

Más información

El libro Plantas Medicinales para el Tratamiento del Sobrepeso, publicado por Editorial Complutense, está disponible de manera gratuita para los profesionales de la salud que lo soliciten en el teléfono de INFITO 902 141 161. Los contenidos también están disponibles para los consumidores en la web INFITO

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