Un estudio publicado en la revista American Journal of Epidemiology afirma que el tipo de proteínas en la dieta influye en la densidad ósea y la salud del esqueleto de la mujer mayor.
Específicamente, la investigación señala que el consumo de proteínas animales reduce el riesgo de osteoporosis y el de proteínas vegetales, en cambio, lo aumenta.
La osteoporosis es una enfermedad metabólica del hueso caracterizada por una progresiva pérdida de la densidad y adelgazamiento del tejido óseo; se produce cuando el organismo no es capaz de regular el contenido mineral de los huesos.
Las conclusiones del trabajo realizado por investigadores estadounidenses- se basan en una encuesta de frecuencia de consumo alimentario realizada con 572 mujeres y 388 hombres de entre 55 y 92 años. Los autores buscaron algún vínculo entre los valores estándares de densidad mineral ósea en las mediciones de densitometría hechas cuatro años después y la cantidad de proteínas totales, proteínas animales y proteínas vegetales consumidas por las participantes del estudio.
Los resultados revelaron una asociación positiva entre el mayor consumo de proteínas animales y el aumento de la densidad mineral ósea. Puntualmente, se produjo un aumento de 0,016 g/cm en la cadera por cada 15 gramos de proteínas animales ingeridas por día. Las misma asociación se observó en la densidad mineral ósea del cuello de fémur, la columna y en la densidad corporal total.
Parece que el beneficio sería levemente mayor en mujeres con bajo consumo de calcio, agregaron los investigadores en el informe del American Journal of Epidemiology. El estudio, por otra parte, también develó una relación negativa entre el consumo de proteínas vegetales y la densidad ósea.
Fuente: American Journal of Epidemiology 2002;155:636-644.