La ingesta de ácidos grasos omega 3 protege de la pérdida de neuronas



  • Según acredita un estudio estadounidense, las personas que tenían el doble de niveles de ácidos grasos (7,5 frente a 3,4) presentaban un volumen cerebral un 0,7 por ciento más grande

La ingesta de ácidos grasos omega 3 está relacionada con una cierta protección ante el riesgo de pérdida de neuronas a consecuencia del envejecimiento, según el estudio, publicado en «Neurology».

Nutriguia, Enero 2014

«Nuestros hallazgos respaldan la idea de que una mayor ingesta de omega-3 a partir del pescado o de complementos nutricionales, es bueno para la salud», ha dicho el autor del estudio, James Pottala, profesor asistente del Departamento de Medicina Interna de la Facultad de Medicina Sanford de la Universidad de Dakota del Sur (Estados Unidos).

Para el estudio, los investigadores midieron los niveles de ácidos grasos omega-3 EPA + DHA en los glóbulos rojos de milcien mujeres que formaban parte del ‘Women’s Health Initiative Memory Study’. Ocho años después, se les tomaron imagenes de Resonancia Magnética para medir el volumen cerebral. En el momento de la prueba, las mujeres tenían una edad media de 78 años.

Los investigadores vieron, entonces, que las participantes cuyos niveles de omega-3 eran el doble de altos tenían un volumen cerebral un 0.7 por ciento más alto. «Los resultados sugieren que el efecto sobre el volumen cerebral es equivalente a retrasar la pérdida normal de neuronas que el envejecimiento conlleva en uno o dos años», ha dicho este experto.

Unos niveles más altos de omega 3 también se asociaron con un mayor volumen en el hipocampo, que desempeña un papel fundamental en el funcionamiento de la memoria. Esta es la primera región del cerebro atacada por el Alzheimer, incluso antes de la aparición de los síntomas.

En general, los pescados ricos en estos ácidos son el salmón, el arenque, el atún y las sardinas. La Asociación Americana del Corazón recomienda comer al menos dos porciones de pescado por semana.

Fuente: Neurology -2014-; doi: 10.1212/WNL.0b013e3182a9584c