La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) ha registrado un importante aumento de las consultas médicas relacionadas con el estrés desde el inicio de la crisis económica que atraviesa España y, especialmente, desde que ha aumentado significativamente la tasa de paro. Veamos las respuestas a todas nuestras dudas:
- ¿Qué es el estrés?
- Es la respuesta fisiológica, psicológica y de conducta de un individuo que intenta adaptarse y ajustarse ante presiones internas y externas. Para que el estrés se desencadene, necesitamos de un estresor que se definiría como el elemento estresante y, en consecuencia, que induce la reacción de estrés. La naturaleza del estresor suele ser muy diversa: puede ser un suceso o acontecimiento, una situación personal o social, una persona, un objeto o los propios hábitos y estilo de vida.
El estrés puede clasificarse como:
- Eutrés o norestrés (estrés positivo): Reacción fisiológica para reaccionar ante cualquier situación o acción anormal que impacta sobre el organismo. Consiste en secreción de adrenalina y otras aminas simpáticas (tener un hijo, ganar la lotería).
- Distrés o patoestrés (estrés negativo): Reacción patológica ante una situación de estrés prolongada que produce sensación de fatiga extrema. Produce alteraciones sistémicas o secuelas multiorgánicas (somatizaciones) e inmunodepresión.
Efectos y escala
El estrés produce alteraciones sistemáticas, somatizaciones y bajada de defensas. En psicología suelen calificarse las situaciones estresantes en una escala de 0 a 100, sobre la base del impacto que produce en las personas. Así, la separación o el divorcio tiene un valor de 70, quedarse sin trabajo 47, problemas económicos, conflictividad laboral o cambio en el tipo de actividad laboral 38. La crisis económica que estamos viviendo actualmente produce una importante inseguridad en las personas, de tal forma, que la falta de recursos económicos supone una de las mayores preocupaciones tanto en nuestro país como en nuestro entorno socioeconómico.
¿Cómo se desencadena el estrés?
Cómo se desencadena…
- Ante la aparición de los primeros síntomas de estrés el organismo genera una reacción de alarma y se encuentra en estado de vigilancia permanente ajustando el metabolismo para hacerle frente.
- La energía de adaptación que disponemos para hacer frente a los síntomas del estrés es limitada, hecho que se ve acentuado por el ritmo de vida actual marcado por la mala alimentación y la falta de sueño. Si la situación de estrés continúa por un periodo de tiempo, el organismo entra en lo que se conoce como fase de agotamiento, colapsándose y claudicando ante el estrés continuado.
- La mala alimentación y la falta de sueño son catalizadores del estrés. Los principales problemas actuales según el último barómetro de CIS son el paro y los problemas de índole económica. Para entender la importancia del impacto de estrés actual hay que destacar que en diferentes estudios se observa que para, aproximadamente el 75% de la población, el dinero y el trabajo son las principales fuentes de estrés, dato que se dispara en tiempos de crisis como la que estamos viviendo. El trabajo y el dinero son las principales fuentes de estrés.
- ¿Cómo afecta el estrés al organismo?¿Qué efectos tiene el estrés en la salud?
- Un análisis realizado sobre más de 300 estudios demuestra que el estrés sostenido de forma crónica tiene un efecto perjudicial sobre el sistema inmunológico. La afectación de este estrés crónico, tiene una especial repercusión sobre los glóbulos blancos, haciendo bajar nuestro sistema de defensas y haciéndonos más vulnerables ante las enfermedades.
El estrés ataca el sistema inmunitario deprimiéndolo. La bajada de defensas provocada por el estrés se manifiesta en diversos problemas de salud como cansancio extremo o agotamiento, resfriados y gripes, dolores de cabeza, afecciones cutáneas y tensiones musculares.
Un estudio de Murray y Lopez (1998), de la Universidad de Harvard, determina que las cinco enfermedades mundiales más comunes previstas para el año 2020 tendrán como factor subyacente de forma directa o indirecta el estrés debido al factor inmunodepresor que tiene. Estas enfermedades son: cardiopatías, depresión severa, accidentes de tráfico, derrames y enfermedades crónicas de pulmón.
Recomendaciones de la SEMFYC
¿Cómo hacer frente a la crisis y el estrés? Las recomendaciones de la semFYC para hacer frente al estrés son:
- Mantener unas adecuadas medidas de prevención y promoción de hábitos saludables que permitan afrontar con un mayor nivel de salud físico y psicológico las dificultades futuras. Reforzar las defensas para hacer frente físicamente a la crisis, es especialmente importante sobre todo en colectivos vulnerables, como son los mayores o personas con enfermedades crónicas. En general, cuanto antes se adopten los estilos de vidad saludables más beneficios en la salud se obtienen.
- Dieta mediterránea: variada, rica en fruta y verduras, productos lácteos y un bajo consumo de carne roja y productos cárnicos. Adaptada a la necesidades de calorías y gasto energético.
- Evitar sustancias estimulantes como el alcohol, el tabaco y las bebidas excitantes, como el café y el té, que pueden sustituirse por infusiones o equivalentes sin cafeína.
- Ejercicio físico. Pasear, nadar, bailar, montar en bicicleta o hacer yoga son opciones al alcance de todos. Hay que aprovechar las horas de luz natural para salir a tomar el aire y el sol.
- Horario de sueño regular. Se reconoce cada vez más que dormir lo suficiente es un aspecto fundamental en la prevención de las enfermedades crónicas y la promoción de la salud. El sueño debe ser reparador y es conveniente dormir al menos 8 horas.
- No automedicarse, siempre prevenir de una manera fisiológica, mediante la alimentación y el ejercicio físico
- Mantener una relación abierta y de confianza con el médico de familia, y mantenida en el tiempo, es importante para enfocar de la forma más correcta nuestros problemas de salud. El médico de familia es el principal proveedor de atención de salud en la mayoría de las situaciones y su papel consiste en prestar atención preventiva y enseñar a hacer elecciones de estilo de vida saludables, identificar y tratar afecciones médicas comunes, evaluar la urgencia de problemas médicos y guiar a la persona hacia el mejor lugar para esa atención, y hacer remisiones a otros especialistas cuando sea necesario.
Saber más…
Han colaborado
- Paco Rodríguez, psicólogo y Profesor de neuropsicología de la Universidad Autonoma de Madrid
- Dr. August Coromines, Catedrático de Inmunología del Hospital Universitario Trias i Pujol de Barcelona
Bibliografía
- Avelina Pérez Bravo. Psiconeuroinmunología. Servicio de psiquiatría. Hospital Xeral de Vigo
- C. Barriga-Ibars, A.B. Rodríguez-Moratinos, S. Esteban b, R.V. Rial. Interrelaciones entre el sueño y el estado inmune. REV NEUROL 2005; 40: 548-56
- C.E. Valencia-Alfonso a,c, A. Feria-Velasco c, S. Luquín b, Y. Díaz-Burke b, J. García-Estrada. Efectos cerebrales del medio ambiente social.REV NEUROL 2004; 38: 869-78
- Lepore SJ. Problems and prospects for the social support-reactivity hypothesis. Ann Behav Med 1998; 20: 257-69
- Matt Egan; Carol Tannahill; Mark Petticrew; Sian Thomas. Psychosocial Risk Factors in Home and Community Settings and Their Associations With Population Health and Health Inequalities: A Systematic Meta-Review. BMC Public Health. 2008
- Saphier D. Neurophysiological and endocrine consequences of immune activity. Psychoneuroendocrinology, 14:63, 1989
- Spiegel D, Sephton SE, Terr AI, Stites DP. Effects of psychosocial treatment in prolonging cancer survival may be mediated by neuroimmune pathways. Ann N Y Acad Sci 1998; 840: 674-83
- Stein M, Schiavi RC, Camerino M: Influence of brain and behaviour on the immune system. Science 191: 435, 1976