Déficits nutricionales, anemias… entre las patologías frecuentes de los niños inmigrantes

Según la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) y la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap): el niño inmigrante requiere un mejor conocimiento de su entorno socioeconómico y de las patologías asociadas por parte del pediatra de atención primaria.

  • En España existen 6 millones personas menores de 16 años (13,3% de la población total), de los cuáles se calcula que 669.709 son inmigrantes (11%).
  • El principal problema es que la atención a los inmigrantes requiere un tiempo mucho mayor en las consultas y los pediatras carecen de él.
  • Las enfermedades de mayor prevalencia en inmigrantes son las mismas que las de los niños autóctonos: enfermedades respiratorias, trastornos gastrointestinales y accidentes. Como patologías más específicas de la inmigración podríamos mencionar la anemia, la parasitación intestinal, el paludismo o la tuberculosis
  • El problema del idioma, el desconocimiento de las vacunas, la dificultad en la anamnesis o las diferentes costumbres complican la asistencia. AEPap y SEPEAP proponen medidas urgentes para solucionar este tema.

En la actualidad, aproximadamente diez millones de niños menores de cinco años mueren cada año en el mundo. Esta situación es debida en gran parte a que la diferencia entre países pobres y ricos es ahora más profunda que hace 10 años y que todavía existen muchos países que no tienen políticas de acción específicas contra la morbi-mortalidad infantil.
“Además de todas esta razones, hay que subrayar la falta de acceso de los niños del tercer mundo a un Sistema de Salud Integrado con una buena Atención Primaria preventiva y curativa, e insistir en que los donantes apoyen una buena estrategia, de forma que las naciones receptoras desarrollen un programa público de salud a nivel de distrito”, explica la Dra. Maite de Aranzabal, pediatra de AP, Coordinadora del Grupo de Inmigración, Adopción y Cooperación Internacional de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap).

“La realidad es que cualquier niño independientemente de su raza, credo, situación o procedencia debe tener una adecuada atención sanitaria y las mismas posibilidades de futuro que la población española”, comenta el Dr. Jesús García Pérez, Jefe de la Unidad de Pediatría Social del Hospital Niño Jesús de Madrid y miembro de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP).

Datos de inmigración y pediatría en España

Según datos recogidos en el año 2007, se estima que en España existen 4.482.568 inmigrantes, lo que supone un 9,9% de la población total. La evolución ha sido notable en estos últimos 7 años, ya que en el 2000 había aproximadamente 900.000 inmigrantes, lo que convierte a nuestro país en el segundo a nivel mundial que más inmigración ha recibido.
En cuanto a la población infantil y adolescente, en España existen 6 millones personas menores de 16 años (13,3% de la población total), de los cuáles se calcula que 669.709 son inmigrantes (11%). Desglosando estos datos, los países con mayor número de población serían: Marruecos con 576.344 (13%); Rumania con 524.995 (12%); Ecuador con 421.384 (9,4%); Reino Unido con 314.098 (7%); y Colombia con 258.726 (5,7%).
En las consultas de Pediatría de Atención Primaria en nuestro país, diariamente se atiende a niños inmigrantes con características y, en algunos casos, enfermedades diferentes a las encontradas habitualmente. “En este sentido, alrededor del 15% de los nacimientos en el Estado son hijos de inmigrantes, lo que supondrá una sexta parte del total de los niños de las consultas en el futuro”, señala la Dra. de Aranzabal.

Problemas y controversias sociosanitarios del niño inmigrante

Está demostrado que la inmigración no es un problema de por sí para la consultas de pediatría de AP, pero si provocan retrasos a causa del idioma, el desconocimiento de las vacunas administradas en su país o de su historia anterior o movilidad geográfica de estos pacientes. A esto hay que añadir el duelo por el abandono de su entorno: personas, cultura, parientes; las diferencias culturales, religiosas y alimentarias; la problemática socio-laboral en su familia; la adaptación escolar; y el desconocimiento del acceso a centros sanitarios. Entre los problemas concretos y menos frecuentes mencionaríamos la circuncisión por motivos religiosos (que no es una prestación del sistema sanitario español y sólo se realiza cuando existen motivos médicos que así lo exijan); la clitoridectomía (en nuestro país constituye delito de maltrato y, por tanto, el profesional asistencial debe denunciarlo); el certificado de virginidad (que no deben emitirse); la encopresis es una condición relativamente habitual que va frecuentemente unida a problemas psicosociales.
Según la Dra. Maite de Aranzabal, “la situación actual de la inmigración en las consultas de pediatría es similar a la española hace muchos años: no están acostumbrados al concepto de prevención y hay una excesiva exigencia tanto del envío a un especialista como de medicación innecesaria, pero esto es un problema que se soluciona con diferente organización en la consulta ( y esto queda en manos de las Administraciones) y con mayor educación sanitaria”.
Aún así, existen muchos mitos falsos sobre los inmigrantes. Por ejemplo, la existencia del fenómeno migratorio lleva asociado con frecuencia un miedo a adquirir enfermedades a través del contacto con estos inmigrantes. Pero la realidad es que no la posibilidad de contagio a la población no inmigrante es mínima pues no existen factores favorecedores, (el clima, los vectores, la genética), y tampoco han crecido las enfermedades mentales con su llegada, a diferencia de lo que se cree. “Se podría decir que el inmigrante requiere las mismas atenciones que el niño autóctono pero precisa más tiempo en la consulta y el conocimiento de algunas patologías específicas nuevas por parte del pediatra de Atención Primaria“, concluye la Dra. Maite de Aranzabal.

Patologías pediátricas más frecuentes

El perfil del inmigrante a su llegada a España es el de un joven sin enfermedades crónicas debilitantes, que presenta algunas enfermedades infecciosas propias de su país. Esta tendencia se irá desvaneciendo de forma progresiva con el tiempo, apareciendo en su lugar patología propia de nuestro país. “La salud global de los inmigrantes que llevan asentados durante más de 10 años se va deteriorando en comparación con los recién llegados, bien por la influencia de condicionantes físicos o de conducta o por dificultades de acceso a los sistemas de salud”, describe el Dr. García Pérez.
Existen diversas patologías en los niños inmigrantes, y dependen mucho de su lugar de origen, pero a nivel general, en recién nacidos “observamos una mayor morbilidad derivada de un mal control de embarazo, además hay una mayor tasa de prematuridad y de infecciones congénitas que pueden ser prevenibles con un buen control de embarazo”, destaca el pediatra de la SEPEAP.
En general, se pueden clasificar las patologías de estos niños como de etiología no infecciosa y de etiología infecciosa. Entre las primeras se encuentran con mucha frecuencia déficits nutricionales, raquitismos, anemias carenciales (bien por hábitos dietéticos propios o por mala técnica de alimentación), hemoglobinopatias, malformaciones congénitas, cardiopatías reumáticas, tumores, pubertad precoz (más frecuente que en la población española) y aumento del número de accidentes (intoxicaciones, quemaduras etc. por falta de educación sanitaria y seguridad).

Patologías infecciosas

Entre las patologías de origen Infeccioso se encuentran con mucha frecuencia parasitosis intestinales que a menudo son múltiples y varían entre un 14-50%; otras parasitosis como la Neurocisticercosis, Leishmaniosis; infecciones como el Paludismo, la Hepatitis B; la Hepatitis A; la Tuberculosis (TBC); las ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual) como Lues congenita, Herpes genital, VIH; las enfermedades dermatológicas como Micosis, pediculosis, sarna, etc.; las enfermedades respiratorias y ORL; Caries dental; y Gingivoestomatitis.
Según el Dr. García Pérez, por áreas o países las más frecuentes son:

  • A- Subcontinente Asiático (India, Pakistán, Bangladesh, Sri Lanka): B-talasemia, Drepanocitosis, Déficit de Glucosa 6 PDH, VHB Hipotiroidismo, Anemia ferripénica, Raquitismo, Parasitosis, TBC, Paludismo.
  • B- Zona Mediterráneo (Magreb, Turquía, Grecia): B-talasemia, Fiebre reumática, Raquitismo, déficit de Glucosa 6 PDH; VHB Anemia ferriopénica, Parasitosis, TBC.
  • C- Zona Afrocaribeña: Drepanocitosis, Déficit de Glucosa 6PDH, VHB, Raquitismo, Esquistosomiasis, Anquilostomiasios, TBC, Paludismo, VIH.
  • D- Extremo Oriente: Betatalasemia, VHB; Déficit de Glucosa 6 PDH; Parasitosis, TBC, Déficit de lactasa.
  • E- América del Sur: Drepanocitosis, Déficit de Glucosa 6 PDH; VHB, Raquitismo, Esquistosomiasis, Anquilostomiasis, TBC, Paludismo, VIH.
  • F- Gitanos: VHB.
  • G- Europa del Este: VHB, VIH, Lues.

Recomendaciones pediátricas

Lo primero que recomiendan los pediatras de AP es que cuando el niño inmigrante llega por primera vez a España, los padres deben llevarlo a la consulta para realizarle una revisión general. La responsabilidad es de los padres pero las autoridades sanitarias deberían concienciarles.
Con respecto al idioma, uno de los graves problemas que existen debido a la falta de entendimiento, es que sólo 2 de cada 10 recetas llegan a la farmacia, por lo que hay una falta de cumplimiento muy importante. Para ello, la SEPEAP y la AEPap plantean dos soluciones: una central de traductores, para poder consultar por teléfono vía Internet las preguntas/respuesta que se quiera hacer al paciente; y la puesta en marcha de diccionarios en el idioma de la persona y traducidos al español (ya funciona en los Servicios de Urgencias).
El mayor impulso en salud debe dirigirse a lograr, por medio del apoyo institucional y de la educación sanitaria, que los determinantes ambientales y sociales de estas familias extranjeras se igualen a los nuestros promoviendo programas y protocolos de actuación que eviten situaciones de irregularidad ante la asistencia sanitaria ya sea por problemas legales, idiomáticos o de conocimiento científico. Así mismo, ellos deben de recibir adecuada información y educación para adaptarse a la realidad sanitaria de la que empiezan a formar parte.
Además, “una adecuada formación de los Pediatras de AP los capacitaría para atender a esta población, conociendo las patologías más frecuentes del inmigrante, y en los casos en que la patología lo requiera por su complejidad serian derivados a una Unidad Especializada en Patología Importada. Por ello, siempre debería haber una buena coordinación y comunicación flexible”, finaliza el Dr. García Pérez.

Diagnóstico certero

AEPap y SEPEAP plantean unas recomendaciones pediátricas que ayuden al diagnóstico desde Atención Primaria (para los casos de niños nacidos y residentes en España): programa habitual del niño sano y pauta para su viaje de vacaciones al país de origen (a la ida, quimioprofilaxis de paludismo y vacunas; y a la vuelta, valorar si hay síntomas de paludismo, amebiasis o miasis); anamnesis del paciente: petición de fecha de nacimiento y nombre correcto, país de procedencia e itinerario del viaje, fecha de llegada, religión o etnia si éstas modifican hábitos de vida, lengua materna y lengua hablada, antecedentes familiares, antecedentes personales: perinatales, enfermedades y tratamientos previos, alergias y vacunaciones, situación laboral/social, alimentación, y desarrollo psicomotor, escolarización y adaptación al medio; y exploración: presencia de síntomas actuales, peso, talla, perímetro craneal si es menor de 2 años, tensión arterial si es mayor de 6 años, agudeza visual y auditiva, exploración de la piel, nódulos, BCG, cicatrices anteriores, auscultación cardio-pulmonar, presencia de ganglios o visceromegalias, desarrollo puberal y exploración genital, desarrollo psicomotor y dentición.
Por último, la vacunación universal ha sido una de las estrategias más efectivas en salud pública, produciendo como resultado una importante disminución en la incidencia de muchas enfermedades infecto-contagiosas e, incluso, la erradicación de otras como viruela o, en muchos países, la polio.
Además, las inmunizaciones proporcionan una protección colectiva sumada a la individual y, si el grupo está ampliamente vacunado, la posible transmisión de la infección quedará neutralizada y el individuo no vacunado estará indirectamente protegido.
Una tarea inexcusable en las consultas de Atención Primaria consiste en recomendar profilaxis antimalaria y medidas higiénico-sanitarias al niño inmigrante que vuelve de vacaciones a su país y carece de la inmunidad que habitualmente tienen sus padres.

Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP)

La Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) surgió con el fin de dar cabida a un colectivo de pediatras con unas necesidades específicas de actualización, formación y problemática profesional diferenciadas y minusvaloradas dentro de la práctica pediátrica hace ya 25 años. Actualmente cuenta con más de 1.700 socios.
La estructura de la SEPEAP está constituida por Sociedades y Secciones Provinciales y/o Regionales de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria que, sin perder su carácter propio, estando vinculadas a la misma y a las Sociedades de Pediatría Regionales de la A.E.P.
Desde el inicio de la SEPEAP se tuvieron claros sus fines, según recogen sus estatutos: promover el estudio de la pediatría Extrahospitalaria, la problemática del niño y del adolescente en el ámbito extrahospitalario (Centros de Salud, Ambulatorios, Consultorios públicos y privados, Consultas Externas de Hospitales, etc.). Además, se pretende abarcar las tres misiones fundamentales de la pediatría Extrahospitalaria: asistencial (preventiva, curativa y rehabilitadora), docente (colaboración en la formación de pregrado del estudiante de Medicina en Pediatría Extrahospitalaria, en la formación de los residentes de la especialidad de Pediatría en Pediatría Extrahospitalaria, en la formación continuada del Pediatra extrahospitalario en ejercicio y en la educación sanitaria de la población a todos los niveles) e investigadora, promoviendo la correlación de los Servicios de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria con los demás Servicios sanitarios y recursos sociales de la comunidad en el seno de la A.E.P.
Toda la información referente a esta Sociedad se encuentra en: www.sepeap.org.

Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap)

La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) se constituyó como una Federación de Asociaciones de Pediatras que trabajan en Atención Primaria, de carácter científico y profesional y sin fines lucrativos, en la actualidad se encuentra asociados más de 2.500 pediatras de Atención Primaria de todo el Estado español.
En su seno se encuentran diferentes Grupos de Trabajo sobre diversas materias (Grupo de Prevención en la Infancia y Adolescencia, Grupo de Vías Aéreas, Pediatría Basada en la Evidencia, Docencia MIR, Cooperación Internacional y Trastorno por déficit de atención e hiperactividad), gestándose en la actualidad otros grupos de trabajo como el dedicado a la patología del sueño infanto-juvenil, pediatria del desarrollo e investigación.
Los objetivos principales de esta Asociación son: promover el desarrollo de la Pediatría en la Atención Primaria. Buscar el máximo estado de salud del niño y del adolescente. Promocionar su salud. Prevenir la enfermedad y facilitar su recuperación en caso de contraerla; fomentar y ejercer la Docencia sobre Pediatría de Atención Primaria del pregraduado y postgraduado, Médicos Residentes de Pediatría, Médicos Residentes de Medicina Familiar y Comunitaria y profesionales del ámbito de la Atención Primaria; fomentar y ejercer la investigación; coordinar los diferentes programas sanitarios relacionados con el niño sano y enfermo; recoger los problemas e inquietudes relacionados con el ejercicio de la Pediatría de Atención Primaria y representar los intereses de sus socios en el marco de las Leyes y ante los organismos de las Administraciones Públicas Sanitarias y Docentes, y otros órganos o entidades Nacionales o Internacionales, Públicos o Privados; promover la búsqueda de las condiciones idóneas para el mejor desarrollo profesional de la Pediatría Social y Comunitaria; y coordinar con otras asociaciones similares, regionales, nacionales o internacionales, actividades y proyectos encaminados a la mejora de la Pediatría en Atención Primaria.
Toda la información referente a esta Sociedad se encuentra en: www.aepap.org