- La SEEI adjudica al chef navarro la gestión del Bar de Tapas del Pabellón de España en la Exposición Universal de Shanghái que se celebrará del 1 de mayo al 31 de octubre de 2010
- Alrededor de 30.000 personas de todas las nacionalidades visitarán diariamente el pabellón español donde se podrán disfrutar las tapas, platos y productos más típicos de nuestra cocina
La Sociedad Estatal para Exposiciones Internacionales (SEEI) ha adjudicado la dirección gastronómica del bar de tapas del Pabellón de España en Expo Shanghái 2010 al cocinero navarro afincado en Madrid Pedro Larumbre. La elección se hizo mediante un concurso restringido en el que participaron los más prestigiosos restaurantes y cocineros del país y en el se valoró no sólo la calidad de cada propuesta gastronómica sino también su afinidad con el lema del pabellón (De la ciudad de nuestros padres a la ciudad de nuestros hijos) y con su recorrido expositivo (De lo inmemorial a lo futuro). La cocina de Larumbe representa a la perfección el presente, el pasado y el futuro de la gastronomía española, ya que conjuga el respeto por las recetas y los productos más característicos de nuestra cultura culinaria con la innovación en las técnicas de preparación de los alimentos y la creatividad a la hora de presentarlos en el plato. Los organizadores esperan que la de la Shanghái sea la mayor Exposición Universal de la historia, con más de 70 millones de visitantes.
Bar de Tapas
Para el chef, navarro de nacimiento y madrileño de adopción, ser el embajador de la gastronomía española en la Expo supone “un gran honor y un importante reto profesional”. Y no es para menos, ya que se calcula que más de 30.000 personas de todas las nacionalidades pasen diariamente por el Pabellón Español. El Bar de Tapas, que ocupa 200 de los más de 7.500 m2 del pabellón, estará dividido en dos zonas: una de barra con taburetes para los visitantes que quieran realizar una comida más rápida a base de tapas y otra con mesas, más tradicional, en la que degustar los platos con más tiempo.
Durante los seis meses que dure la Expo, Larumbe se encargará de dar de comer a los visitantes desde las nueve y media de la mañana hasta las diez y media de la noche, ininterrumpidamente, y de atender a las delegaciones españolas, incluidas las Comunidades Autónomas, y extranjeras participantes en Expo Shangai 2010. Para responder a esta demanda, contará con un equipo de 150 profesionales y con la experiencia y el buen hacer que han hecho de él una de las figuras más destacas de la alta cocina en nuestro país. La oferta del Bar de Tapas estará basada en la cocina tradicional española pero adaptada a la cocina moderna y con muchos guiños al público chino (arroz, azafrán…). Los productos y viandas que se ofrecerán serán 100% españoles y, entre otros, habrá cerca de 1.000 jamones ibéricos, 25.000 litros de aceite de oliva La Española, 3.000 botellas de Tio Pepe, 2.400 botellas de Tinto Beronia, otras tantas de Hacienda Monasterio, más de 300.000 botellas de cerveza y, por supuesto, no faltaran las cañas tan típicas de barril de Estrella Galicia, 500.000 botellas de agua mineral Cabreiroá, 12.000 kg de café El Templo y los mariscos y pescados vendrán de la mano de La Astorgana. Los precios oscilarán entre los 20 y 30 euros.
Pabellón de España
El Pabellón de España en la Exposición Universal Shanghái 2010, que comienza el 1 de mayo, parte de un icono arraigado no sólo en la cultura española sino también en la china: el cesto de mimbre. En línea con la filosofía de Expo 2010 Shanghái, Mejor ciudad, mejor vida, el edificio alzará su estructura en torno a una plaza, que es para la ciudad lo que el patio a la casa: un lugar de respiro, de relax, de fiesta y, al mismo tiempo, un espacio articulador. Con su propuesta, Tagliabue pretende huir del concepto tradicional de caja contenedora, abriendo paso a grandes patios que a la manera de cestos que permitirán un tránsito fácil y fluido entre interior y exterior, y entre los distintos espacios que configurarán el pabellón.
La fachada del Pabellón contará con el mimbre como principal elemento de revestimiento, y estará sustentada por un entramado de perfiles tubulares de acero. La estructura de tubos de acero será la que configure el “esqueleto” rígido del pabellón, que será luego revestido con la “piel” de mimbre. La luz penetrará en el interior del pabellón tamizada por las distintas texturas del tejido del mimbre. Los materiales propuestos para la construcción del pabellón son ecológicamente sostenibles y el sistema constructivo elegido permitirá el desmontaje del edificio y el posterior reciclaje de los materiales. Si bien en este sentido, España tiene previsto que el pabellón tenga permanencia en la ciudad de Shanghái, pudiendo ser sede, tras la Expo, de organismos españoles.
Pedro Larumbe
Pedro Larumbe comenzó su andadura profesional en su ciudad natal cuando sólo tenía 16 años y pronto se sintió atrapado por la alquimia de los fogones. Fue jefe de cocina en el restaurante La Sardina de Santander y, posteriormente, de El Molino, en la misma ciudad. En 1981 se trasladó a Madrid para ser jefe de cocina del mítico restaurante Cabo Mayor, desde donde en la década de los 80 capitaneó uno de los más señalados impulsos de la gastronomía española. Aquí, influenciado por las virtudes de la cocina cantábrica evolucionada, desarrolló una cocina de propio cuño, original y creativa pero fiel a las raíces de la tradición gastronómica española, a través de platos brillantemente rematados, protagonizados por el pescado y las verduras principalmente y coronados por salsas muy delicadas, un estilo que le valió en 1984 la obtención del Premio Nacional de Gastronomía.
En 1996 Larumbe se independizó y abrió su propio restaurante en el histórico edificio del Centro Comercial ABC Serrano (Serrano, 61. Tel: 91 575 11 12) donde elabora una cocina más actual, ejecutada con brillantes dosis de imaginación, con recetas sencillas y limpias, pero siempre partiendo de un recetario muy tradicional de influencia Navarra y alimentada por un producto estacional de la máxima calidad. Su elección como representante de la alta cocina española en la Expo de Shangai, supone el reconocimiento definitivo a su brillante trayectoria y a la autenticidad de su cocina.