Con motivo del Día Mundial de la Osteoporosis el próximo 20 de octubre, la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (FHOEMO) y las compañías Roche y GlaxoSmithKline (GSK) impulsan la campaña Una vez al día, una vez a la semana, una vez al mes. Cuida tu osteoporosis, destinada a concienciar a las mujeres a que no abandonen su tratamiento.

Uno de los principales problemas de la osteoporosis es el inclumplimiento o abandono del tratamiento, que en España se sitúa en más de un 60%. Esto provoca que los huesos queden desprotegidos, aumentando el riesgo de fractura. Las comunidades autónomas más afectadas en el problema del abandono son Andalucía y la Comunidad Valenciana, ya que son alrededor de 250.000 mujeres las que se estima que dejan de tomar su medicación contra la enfermedad. En Madrid y Cataluña, sólo el 30% de mujeres con osteoporosis cumplen con el tratamiento de forma adecuada.

Con esta campaña, basada en folletos y displays informativos en 4.000 farmacias de toda España y anuncios en radio y televisión durante el mes de octubre, se pretende llegar al menos al 80% de los 2,9 millones de mujeres con osteoporosis que hay en nuestro país.

Carmen Maura, que presentó la campaña la pasada semana, ha decidido prestar su imagen como ejemplo de mujer activa. «He conocido muchas mujeres que han abandonado el tratamiento, porque como no se nota mejoría, deciden olvidarse. Hay que ser conscientes de lo importante que es seguir con la medicación y tener la fuerza de voluntad para proponerse ese hábito como una obligación», destaca la actriz española. «Hay tratamientos eficaces y cada vez más cómodos. Hay que acudir al médico porque él puede aconsejar qué tratamiento es el más adecuado, si una vez al día, una a la semana o una al mes», añade Carmen Maura.

La importancia de seguir el tratamiento

El objetivo de FHOEMO con la campaña es que se incremente el cumplimiento del tratamiento en las mujeres con osteoporosis y que se animen a acudir a su médico con regularidad para saber el estado de sus huesos. «Los fármacos, para que funcionen, deben de tomarse. Como la osteoporosis no da síntomas y la mayoría de las mujeres tienen una vida muy activa después de la menopausia, muchas acaban abandonando la medicación», explica el doctor Manuel Díaz Curiel, presidente de FHOEMO.

Son precisamente las pacientes más jóvenes y activas, entre 55 y 60 años, que todavía no han sufrido una fractura, las que se muestran más reacias al tratamiento, por lo que les condiciona en su ritmo de vida. No obstante, como recalca el doctor Díaz Curiel, «ahora existen pautas de administración más cómodas y espaciadas que permiten que las mujeres elijan el tratamiento que mejor se adapte a ellas, sea diario, semanal o mensual».