El medico Interctivo, 11 de Abril de 2007
El consumo de cacao podría reducir la tensión de forma similar a los fármacos antihipertensivos, según un estudio del Hospital Universitario de Colonia (Alemania) que se publica en la revista Archives of Internal Medicine. Los polifenoles del cacao poseen efectos beneficiosos sobre la salud cardiovascular a través de su acción sobre la presión arterial, a diferencia de los polifenoles del té.
Las actuales guías médicas aconsejan a los hipertensos consumir más frutas y vegetales. Los expertos creen que alimentos como los polifenoles o los flavonoides de las frutas y vegetales poseen efectos beneficiosos sobre la presión arterial y los riesgos cardiovasculares en los países desarrollados.
Según los autores de este trabajo, el té y los productos con cacao aportan una gran proporción del consumo total de polifenoles en los países occidentales. «Sin embargo, ni el cacao ni el té se encuentran entre los alimentos recomendados por las guías médicas por sus efectos protectores del corazón o en la dieta de hipertensos, a pesar de que han sido asociados con una menor incidencia de episodios cardiovasculares», explican.
Dirk Taubert y sus colaboradores dirigieron un análisis de diez estudios publicados con anterioridad, en cinco de ellos se estudiaban los efectos del cacao sobre la presión arterial y en los otros cinco los del té. En todos estos trabajos participaban al menos diez personas y sus resultados se publicaron entre 1966 y 2006.
En los estudios con cacao participaron 173 personas que incluían 87 asignados a consumir este alimento y 86 controles, el 34 por ciento de ellos con hipertensión. Los participantes fueron seguidos durante una media de dos semanas. Cuatro de los cinco ensayos mostraron una reducción tanto en la tensión sistólica como en la diastólica. En comparación con quienes no consumieron cacao, la presión sistólica era 4,7 milímetros de mercurio menor de media y la diastólica 2,8 milímetros menor.
Según los investigadores, los efectos son comparables a los alcanzados por los fármacos antihipertensivos. La reducción de 4 a 5 milímetros de mercurio en la presión sanguínea sistólica y de entre 2 y 3 milímetros en la diastólica podría reducir el riesgo de ictus alrededor de un 20 por ciento, de enfermedad cardiaca coronaria un 10 por ciento y la mortalidad por toda causa un 8 por ciento, señalan los investigadores.
De los 343 individuos que formaban parte de los otros cinco estudios sobre el té, 171 tomaban esta bebida y 172 servían como controles. En estos estudios, que tuvieron una duración media de cuatro semanas, el consumo de té no se asoció con una reducción en los niveles de presión sanguínea en ninguno de ellos.
El té y el cacao son ricos en polifenoles, pero mientras el té negro y verde contiene más componentes conocidos como ‘flavon-3-ol’, el cacao contiene una mayor cantidad de otro tipo de polifenol, la procianidina. «Esto sugiere que los diferentes polifenoles deben ser diferenciados con respecto a su potencial reductor de la presión arterial y por ello en la prevención de la enfermedad cardiovascular», indican los autores de la investigación. Esto supone que los polifenoles del té son menos activos que los del cacao, explican.
Según los investigadores, si se emplea de forma racional los productos con cacao podrían considerarse parte de una dieta dirigida a disminuir los riesgos de la hipertensión.