El Medico Interactivo, 25 de Noviembre de 2005
En los últimos años, uno de los grandes debates sobre nutrición lo están protagonizando los antioxidantes, presentes de forma natural en los alimentos. Sin embargo, aún existe un gran desconocimiento sobre qué beneficios reales aportan y qué alimentos contienen mayor cantidad de estas sustancias.
En los adultos, además de frutas, hortalizas y verduras, parece claro que el té y el vino ayudan a recibir el aporte total de antioxidantes. Sin embargo, respecto a niños y adolescentes, hasta ahora no se había publicado ningún estudio que mostrara qué alimentos deben consumir, para asegurar un buen aporte. Por ello, la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (Sedca) ha presentado la primera Rueda de Alimentos ricos en Antioxidantes especial para niños y adolescentes, que enseña de forma didáctica y gráfica qué alimentos son más positivos para la salud de estos colectivos por su potencial antioxidante.
El estudio concluye que todavía tenemos pendiente la asignatura de las frutas y de las hortalizas, que han de ser la base para obtener un variado y buen aporte de antioxidantes. Así, hay otros alimentos, como el cacao soluble, gran aliado de los desayunos, o las legumbres, que pueden ser piezas clave para cubrir nuestras necesidades de estas sustancias.
Los antioxidantes no sólo son necesarios en la edad adulta. Según la Sedca, estudios epidemiológicos han demostrado que los niños que consumieron dietas ricas en antioxidantes al llegar a la edad adulta gozan de mejor salud, especialmente cardiovascular.
La Sedca aconseja que la base del aporte de antioxidantes en la dieta han de ser como mínimo 5 raciones al día de frutas, hortalizas y verduras. Esto representaría casi el 55 por ciento de la ingesta de antioxidantes. Pan, patatas, cereales y legumbres representarían el 26 por ciento, pero la novedad de esta Rueda es la inclusión del cacao soluble como alimento importante. El cacao es un concentrado de antioxidantes, en concreto de flavonoides, y su consumo aporta un 16 por ciento. Aceite de oliva y frutos secos cerrarían esta Rueda.
Dieta recomendable
A partir de todo esto, sería aconsejable esta dieta: fruta (tres piezas diarias), pan (100 gramos diarios); patatas (una o dos al día); verdura (al menos cinco días por semana); cacao (una o dos cucharadas soperas al día); legumbres (un plato dos o tres veces por semana) y aceite de oliva en cantidad suficiente para aderezar los platos.
Tanto el cacao como el vino o el té contienen polifenoles que ejercen un efecto protector sobre la función vascular y neutralizan la acción de radicales libres, que a la larga causan enfermedades y favorecen el envejecimiento.