En Nutriguia.com hemos asistido a una presentación de Corderex, donde hemos degustado unas ricas mini hamburguesas de cordero maridadas con cerveza… ¿Sabes la mejor forma de catar cerveza? Te lo contamos aquí…
- Primero: Observar
Hay que ver el color de la cerveza y su espuma. Si la espuma es muy abundante o no. También si desaparece rápido o perdura en el tiempo. Si la cerveza es brillante, nebulosa u opaca, hay que ver también sus tonalidades al contraluz.
- Segundo: Oler
Como hacemos en el caso del vino, también hay que oler. Hay que hacer pequeñas inhalaciones continuas acercando lo más posible el vaso a la nariz. De ese modo podremos detectar los aromas presentes, en especial los que tengan mejor olfato. Agitar el vaso de manera circular (lo mismo hacemos en el caso del vino) y repetir la inhalación, para poder abrir abanicos de aromas, que va a desprender. Notaremos unos aromas más intensos y otros más débiles.
- Tercero: Probar
Hay que beber un poco y pasarlo por la boca para enjuagar bien. Después volvemos a beber otro poco, lo pasamos de nuevo por la boca y lo dejamos por todo el paladar y lengua para detectar los sabores de la cerveza: desde los más intensos hasta los más débiles, las notas dulces, ácidas y amargas.
- Cuarto: Probar y oler
Bebemos y aspiramos para poder tener la conjunción olor/sabor en la parte en que se unen los conductos de nariz y boca.
- Cinco: Sentir en boca y garganta
Después tomamos de nuevo un poco y sentimos si la cerveza tiene cuerpo ligero, medio o robusto; si la carbonatación es pobre, media o excesiva. Al pasar el líquido, debemos sentirlo en la garganta y comprobar si el sabor perdura y si es intenso o no.
- Seis: Disfrutar
En buena compañía, con unas buenas tapas, #cerveceando, divinamente.
En las fotografías: Jaime O´Connor, maestro cervecero.