La Tercera – Chile
Una dieta ideal para subir de peso debe incluir todo tipo de alimentos. Pero como requieren más de 2.000 calorías diarias, éstas pueden ser alcanzadas a través de aliños, frutos secos, preparaciones más calóricas o con suplementos alimenticios.
Es frecuente que los medios de comunicación y la publicidad apuesten más por el mensaje «baje de peso» que «aumente rápidamente uno kilos». Esto se debe a que en las últimas décadas la población obesa ha superado a aquella con problemas de bajo peso. Sin embargo, al igual que una personas con sobrepeso que lucha por ser más esbelta, para quienes sufren de delgadez extrema ganar unos kilos puede ser una tarea titánica. De hecho, los efectos de este falta de kilos pueden ser igual o más devastadores que la obesidad, ya que generan también una baja autoestima y una relación problemática con su cuerpo.
Aunque los especialistas coinciden en que no existe una dieta estándar para todas las personas delgadas, ya que las necesidades calóricas dependen de su estado nutricional y de la actividad física que realicen, sí entregan algunas recomendaciones para facilitar el aumento de peso. Anabella Rebolledo, nutricionista de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, sugiere, por ejemplo, un cambio de los hábitos en general y en especial de los alimentarios.
«Es necesario respetar las cuatro comidas diarias e incluir dos colaciones, para la media mañana y en la tarde. Para eso, debe levantarse media hora más temprano para tomar un buen desayuno y cenar bien», advierte la profesional.
La doctora Ada Cuevas, médico especialista en nutrición y diabetes del Departamento de Nutrición de la Universidad Católica, agrega que un régimen ideal para subir de peso debe incluir algo de todos los grupos de alimentos.
Alimentos balanceados
La especialista sostiene que las personas muy delgadas, al igual que los individuos con peso adecuado, deben incluir en su dieta todo tipo de productos para lograr un aporte apropiado de nutrientes: «Una alimentación saludable incluye el consumo de verduras, frutas, leguminosas, leche y sus derivados, carnes con bajo contenido de colesterol (pescado, pollo, pavo), ingerir preferentemente aceites vegetales».
La especialista agrega que, como se requiere aumentar el aporte calórico, simplemente a estas mismas comidas se les agrega aliños, salsas u otros alimentos que actúan como complementos calóricos», dice la doctora Cuevas.
Según Paula Rojas, endocrinóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, las personas delgadas -para aumentar de peso- deben tener un régimen alimenticio programado y fraccionado durante el día de manera de asegurar un aporte calórico sobre las 2.000 calorías, con un aumento de peso deseado de entre dos a tres kilos mensuales. Anabella Rebolledo especifica que el aporte nutricional debería ser: «50% a 60% de hidratos de carbono (arroz, cereales y pastas), 30% de aceites y grasas, y entre un 10% y 20% de proteínas que aportan el pescado, las carnes y los quesos».
Con respecto a los hábitos que son perjudiciales para el aumento de peso, la doctora Ada Cuevas destaca la sobrecarga de trabajo, el estrés y saltarse comidas: «No almorzar, por ejemplo, para una persona delgada significa que le está restando a su dieta alrededor de 300 calorías que sumadas al consumo de productos light o edulcorantes dietéticos disminuyen drásticamente la necesidad nutricional requerida para engordar. Además, el consumo de mucho café y el cigarrillo inhiben el apetito, por lo que deberían ser restringidos».
Si la dieta de aumento calórico no da buenos resultados, la especialista recomienda el uso de suplementos alimenticios, que son latas de proteínas concentradas -generalmente son leches con sabores-, que pueden aportan alrededor de 250 calorías por cada 250 cc. Finalmente, las expertas concluyen que para subir de peso sanamente se requiere mezclar una dieta calórica con una rutina de ejercicio, ya que la actividad física, aunque quema más grasas, contribuye a aumentar y tonificar apropiadamente la masa muscular.
Las causas de un bajo peso
De acuerdo con la endocrinóloga Paula Rojas, cuando una persona es muy delgada lo primero que se debe descartar es la existencia de una enfermedad metabólica, como un trastorno en la tiroides, diabetes o patologías relacionadas con las grándulas suprarrenales. «Problemas digestivos, como síndromes de mala absorción de nutrientes, diarreas crónicas o parasitosis, enfermedades tumorales e infecciosas, más algunos medicamentos y el exceso de cigarrillo, también pueden estar causando el bajo peso», dice la experta.
Pero, por otro lado, Rojas sostiene que existe un importante grupo de personas que por características genéticas son más delgadas que el promedio y, generalmente, provienen de familias de bajo peso donde unos de los padres es también muy flaco. «Este grupo de individuos, a pesar de comer igual o más que una personas normal, mantienen un bajo peso. Pueden tener un mejor metabolismo, por tanto parte de la energía que consumen la procesan rápidamente o tienen un nivel de saciedad precoz», comenta la endocrinóloga.
Autor: Debora Gutierrez A.