Y un 75% de ellos cree llevar una dieta sana…
- Sin embargo, el peso preocupa de forma distinta en función de cada país, ya que mientras en Brasil y Portugal el 83 por ciento de los encuestados se manifiesta inquieto por su peso, en otros países como Noruega y los Países Bajos el 38 y el 35 por ciento respectivamente expresa esta preocupación.
medicosypacientes.com, 9 de octubre 2009
La mitad de los jóvenes de entre 12 y 17 años reconocen estar preocupados por su peso e incluso el 30 por ciento se siente presionado para bajar unos kilos, mientras que el 75 por ciento cree que la dieta que sigue es sana o bastante sana, según los resultados de un estudio con más de 61.000 adolescentes de 31 países llevado a cabo en Internet por Habbo.
Según dicho estudio, la comida y el físico mantienen una relación cercana al mundo de los adolescentes y un 36 por ciento asegura que la pérdida de peso o su apariencia en general son una razón suficiente como para cambiar su dieta. Sin embargo, el peso preocupa de forma distinta en función de cada país, ya que mientras en Brasil y Portugal el 83 por ciento de los encuestados se manifiesta inquieto por su peso, en otros países como Noruega y los Países Bajos el 38 y el 35 por ciento respectivamente expresa esta preocupación.
Por otro lado, aquellos que reivindican tener una de las dietas más saludables son los jóvenes de Dinamarca, donde el 84 por ciento cree que sigue una alimentación adecuada, mientras que en Alemania sólo el 68 por ciento está de acuerdo con esta afirmación. Sin embargo, estas dietas no son tan equilibradas como puede parecer, puesto que sólo el 34% del global de los encuestados come de 3 a 5 porciones de fruta o verdura al día, y el 6% no come ni una porción.
Además, uno de cada cuatro jóvenes de todo el mundo consume ‘fast food’ o comida rápida por lo menos un par de veces a la semana. Aunque los adolescentes consideran sana su alimentación, la mitad de los encuestados aseguran que su dieta es tan mala como la de la generación de sus padres.
En cuanto a los hábitos sociales en las comidas, el 61 por ciento se sienta con su familia a diario para comer juntos. Los adolescentes italianos están particularmente vinculados a la familia, ya que el 82 por ciento come en familia todos los días, frente a Estados Unidos y Reino Unido donde sólo el 39 y el 48 por ciento, respectivamente, comen en familia.
Siguiendo con los ejemplos de una familia tradicional, según los autores del estudio, el 71 por ciento de los encuestados afirma ser su madre la que les prepara la mayoría de sus comidas. Con los padres como líderes en el papel de cocineros, más de un cuarto de los italianos reclama no saber cocinar, muy seguidos de los jóvenes de los Países Bajos, Brasil y Portugal, donde un 23 y un 22 por ciento confiesa no tener habilidades en la cocina.
«Está claro que la imagen del físico es un área significativa en la preocupación de los adolescentes con sentimientos bajo presión para cambiar su forma de alimentarse con el fin de mejorar su apariencia», explica Epifanía Pascual, responsable de Habbo para España y América Latina.