Nunca me gustó demasiado Inglaterra. Siempre pensé (ignorante de mí) que se trataría de una tierra casi yerma y plagada de estirados ingleses bebedores compulsivos «La ciudad de Oxford: cómo enamorarte de Inglaterra»
Nunca me gustó demasiado Inglaterra. Siempre pensé (ignorante de mí) que se trataría de una tierra casi yerma y plagada de estirados ingleses bebedores compulsivos «La ciudad de Oxford: cómo enamorarte de Inglaterra»