Aunque los resultados de algunos estudios anteriores sugerían que las personas con unos cuantos kilogramos de más a los 70 y tantos años vivían más que sus homólogos más delgados, un nuevo estudio, en el que se midió el peso de los sujetos en varias ocasiones a lo largo de un mayor período de tiempo, revela ahora lo contrario.
NCyT, Septiembre 2011
El equipo de Pramil N. Singh de la Universidad de Loma Linda, en Estados Unidos, ha comprobado que, de entre los sujetos de estudio, los hombres de más de 75 años de edad y con un índice de masa corporal (IMC) superior a 22,3 tenían una expectativa de vida 3,7 años más corta, y las mujeres mayores de 75 años con un IMC por encima de 27,4 tenían una expectativa de vida 2,1 años más corta.
Por lo general, se considera que un IMC de entre 18,5 y 24,9 es propio del peso normal, un IMC de 25 a 29,9 denota sobrepeso, y un IMC de 30 o más corresponde a la obesidad.
Al respecto de los resultados de algunos estudios anteriores que sugerían que las personas con unos cuantos kilogramos de más a los 70 y tantos años vivían más que sus homólogos más delgados, Singh argumenta que los datos reunidos fueron insuficientes y que eso condujo a interpretaciones equivocadas. Por ejemplo, en tales estudios se trabajó a partir de una única medición inicial del peso de cada individuo, sin tener en cuenta los cambios de peso o cómo estos afectan a la esperanza de vida. Además, la mayoría de los estudios anteriores contaron con un periodo de menos de 19 años de vigilancia para registrar las defunciones. Y los análisis posteriores han demostrado que es una cantidad insuficiente de tiempo para lograr determinar debidamente los riesgos asociados a distintas franjas de peso.
Singh y sus colaboradores dispusieron de la estupenda oportunidad de contar con un seguimiento de 29 años a un conjunto de 6.030 sujetos de estudio, quienes tuvieron un peso estable, nunca fumaron, y no padecían enfermedades crónicas severas al inicio del estudio.
En ese seguimiento, se examinó la mortalidad, y también se hicieron múltiples mediciones del peso corporal de los sujetos. Todo ello permitió realizar una evaluación más precisa.
Los resultados del nuevo estudio sugieren que los individuos mayores con un peso normal deberían mantenerlo, y evitar el sobrepeso.