«He perdido 32 kilos desde que me sometí a una operación en junio”
El doctor Alonso Poza opina que el obeso da una apariencia externa de felicidad, pero lo cierto es que esconde numerosos complejos y en muchas ocasiones baja autoestima
Madrid, 5 de noviembre de 2010. VHA tiene 35 años, pesaba 166 kilos y se sometió a cirugía de la obesidad mórbida, llamada bariátrica, el pasado mes de junio. Desde entonces ha perdido 38 kilos. Pero aquí no ha acabado su adelgazamiento. El cirujano que la operó, el doctor Alfredo Alonso Poza, director de la Unidad de Cirugía Metabólica y Obesidad Mórbida del hospital USP San Camilo, cree que como mínimo va a duplicar esta cifra. La vida de esta mujer ha cambiado ya. Se encuentra en mucho mejor, ha recuperado la salud… y su trabajo. Además, está feliz de poder viajar: en avión, en tren, en autobús, algo hasta ahora lleno de trabas y dificultades. Por ello, insta a las personas que padecen la obesidad a que pasen por el quirófano.
Verdades y mentiras
En el transcurso del Primer Foro Profesional de la Cirugía de la Obesidad ‘Verdades y mentiras’, el doctor Alonso Poza ha enumerado una serie de verdades y mentiras acerca de la enfermedad.
- Entre las primeras, ha explicado que el obeso suele ser una persona simpática y sociable, pero se le rechaza más que a un paciente con sida, sin que esto sea un menosprecio, a lo que ha añadido que da una apariencia externa de felicidad, pero lo cierto es que esconde numerosos complejos y en muchas ocasiones baja autoestima.
- En la otra cara de la moneda, no es cierto que el obeso no coma apenas y todo le engorde. “No dejan de picar o de comer dulces”, ha aseverado el experto. También ha negado que la obesidad se deba únicamente a factores hereditarios, sino más bien ambientales, y ha detallado que esto sólo ocurre en un 5 por ciento de los casos, aunque existan cerca de 300 genes implicados en la susceptibilidad por engordar. En este sentido, ha señalado que “lo que se adquiere es el hábito alimenticio de los padres o el entorno familiar”.
3 cirugías
Con todo, su ponencia, bajo el título ‘Tratamiento quirúrgico de la obesidad y cirugía metabólica’, se ha centrado en las tres cirugías fundamentales para la obesidad:
- restrictivas, que reduce el volumen del estómago produciéndose la pérdida de peso por la disminución de la comida que ingiere el paciente (fundamentalmente hoy en día la gastrectomía tubular o en manga);
- malabsortivas, que provocan una malabsorción de la comida a nivel del intestino, eliminándose por las heces (derivación bilio-pancreática y el cruce duodenal);
- y mixtas, que combinan procedimientos de restricción y de malabsorción (distintas variantes del By-pass gástrico).
Obesidad mórbida: 4 factores
Por su parte, el endocrino y nutricionista de USP San Camilo, Alejandro Domingo, ha explicado que la obesidad mórbida es un trastorno nutritivo en el que influyen cuatro factores a considerar:
- la alimentación,
- la actividad física,
- el factor individual
- unido a la genética y a trastornos que pueden ser de tipo endocrino- y la ansiedad y el estrés.
“Como es natural, la Endocrinología es fundamental para conocer esos factores hormonales, y la Nutrición es importantísima para saber qué alimentación es la más idónea para evitar la obesidad mórbida”, ha destacado.
Finalmente, el doctor Francisco Alsina, del Servicio de Anestesia de USP San Camilo, ha referido que hay que hacer un buen estudio preoperatorio para prever posibles complicaciones que pueda tener la anestesia en estos pacientes por las patologías asociadas que presentan: cardiopatías, hipertensión, diabetes, etc.
“Hay que detectar las posibles deficiencias del metabolismo, de su hemodinámica, capacidad de ventilación, respuesta cardiológico, etc., hay que tener siempre prevista cualquier alteración. En definitiva, hacer una buena valoración preanestésica para prever posibles complicaciones y administrar una anestesia adecuada al peso”, ha concluido.