Gastronomía, talleres y música para celebrar el Día de Muertos mexicano en La Vaguada

  • El director Regional para Europa de Turismo de México y el subdirector de La Vaguada han inaugurado hoy, 31 de octubre, el programa de actividades que tendrá lugar hasta el 3 de noviembre en el centro comercial madrileño
  • El público asistente podrá disfrutar durante el puente de Todos los Santos de degustaciones gastronómicas, bailes folclóricos, actuaciones de mariachis o talleres de calaveritas, entre otras actividades gratuitas

Madrid, 31 de octubre de 2013. El director Regional para Europa del Consejo de Promoción Turística de México, Javier Aranda, y el subdirector de La Vaguada, Daniel Rodríguez, inauguraron hoy el programa de actividades que se llevará a cabo hasta el 3 de noviembre en el centro comercial madrileño para celebrar la festividad del Día de Muertos.

Según Javier Aranda, “una de las tradiciones que no podía faltar en esta festividad y que los visitantes de La Vaguada van a tener oportunidad de contemplar es el altar de muertos, una construcción simbólica dedicada en esta ocasión al cantante y compositor José Alfredo Jiménez con motivo del 40 aniversario de su muerte” (arriba en la fotografía de apertura).

Por su parte, Daniel Rodríguez mostró su satisfacción por poder acoger una celebración tan importante de México en el corazón de Madrid: “Celebrar el Día de Muertos es una oportunidad única para conocer un poco más de esta tradición gracias a un variado calendario de actividades culturales y gastronómica, como bailes folclóricos, actuaciones de mariachis, talleres de calaveritas o degustaciones de mezcal y tequila”.

La presidenta de la comunidad mexicana en Madrid, Mirna Pérez, explicó a todos los asistentes el origen y la historia de esta tradición prehispánica: “El Día de Muertos es una fiesta para recordar a los muertos en vida, el reencuentro con la gente que se fue, de ahí que en el altar de muertos les recordemos con ofrendas de aquellos platos que les gustaba comer, de lo que bebían, y de otros recuerdos u objetos que le pertenecieron. En el altar tampoco puede faltar una foto de la persona fallecida y la Virgen de Guadalupe, presente en todos los hogares mexicanos”.

Todas las personas que visiten La Vaguada podrán ver las ofrendas dedicadas a José Alfredo Jiménez a través de los cuatro elementos de la naturaleza: la tierra –representada por los frutos que alimentan a las ánimas con su aroma; el viento, a través del papel picado o papel de china; el agua, para que las almas calmen su sed, y finalmente el fuego, con velas encendidas por cada alma recordada y olvidada. “En esta ocasión también hemos puesto además de una guitarra, algunas botellas de tequila porque le gustaba mucho al cantante mexicano”, añade Mirna Pérez.

Celebración única en el mundo

Declarada como “Obra maestra del patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO en 2003, para los mexicanos esta festividad es una forma de expresión cultural tradicional que data de tiempos prehispánicos y que ha ido pasando de generación en generación.

La diversidad cultural de México se manifiesta en fiestas populares, tradiciones y costumbres coloridas, algunas de las cuales son únicas en el mundo. Tal es el caso de la ceremonia de Día de Muertos, celebrada en todo el país.

Desde tiempos prehispánicos, en México se tiene la creencia de que las almas vuelven a visitar a sus familiares, comen y beben como lo hacían cuando estaban vivos. Los festejos del Día de Muertos comienzan el 31 de octubre, cuando a lo largo de todo México se colocan vistosos y coloridos altares con ofrendas a esperar la llegada de las ánimas. Por la noche, los panteones adquieren un semblante aún más solemne que de costumbre ya que son visitados por cientos de personas, que alumbradas por la luz de las velas, elevan sus plegarías hacia sus seres queridos en una atmósfera de tintes amarillos.

A la mañana siguiente, el 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, llegan las ánimas de los niños y el 2 de noviembre -Día de los Fieles Difuntos- llegan las ánimas de los adultos.

En algunas ciudades se organizan festivales y certámenes culturales y artísticos: dibujo, fotografías o elaboración del mejor pan de muertos. También se organizan concursos de disfraces, premiando al mejor disfraz de La Catrina, la representación más famosa de “Su Majestad La Muerte”, nacida de la imaginación y sentido del humor del grabador mexicano José Guadalupe Posada.

Las celebraciones más conocidas en el país y a nivel mundial son las de los pueblos del lago de Pátzcuaro, en Michoacán, Tuxtepec en Oaxaca y las de Mixquic, un pueblo en el sur de la Ciudad de México.

Para más información visite www.enlavaguada.com y www.visitmexico.com