Gran acogida en Madrid de la exposición de 14 maquetas de embarcaciones acompañada de una showroom de vinos de distintas regiones portuguesas y dulces.

En Portugal el “vinho” ha estado siempre muy unido al mar, vía histórica de salida comercial de los diferentes tipos de vino que se elaboran en ese país. Esa estrecha relación es el hilo argumental del elegante evento se celebró el pasado 21 de junio en el centro de Madrid, concretamente en el hotel Westin Palace, en la Plaza de las Cortes de Madrid.

La bodega portuguesa Quinta da Boeira, cuyos orígenes se remontan a 1850, ha organizado, con el apoyo de la Agencia especializada Efecto Directo, la presentación, por primera vez en Madrid, de una selección de catorce maquetas de embarcaciones históricas de Portugal, de los siglos XVI al XIX, de su colección particular, unida a una degustación de vinos de bodegas de diversas regiones vitivinícolas portuguesas como: Tras-os-Montes, Vinhos Verdes, Douro, Carcavelos y Oporto. Una unión de historia, arte, cultura y gastronomía.

Los asistentes admiraron la belleza de esta selecta colección privada de modelismo naval propiedad de Quinta da Boeira, compuesta por carabelas, naves y galeones, de hasta dos metros de longitud, mientras disfrutan los distintos matices de los vinos portugueses. Una inmersión en la historia y tradición vinícola del país vecino. En paralelo y como acompañamiento se celebró una pequeña showroom y degustación de dulces portugueses, y Quinta da Boeira también dio a probar su colección de Tawnies a los asistentes.

Sobre Quinta Da Boeira

Quinta da Boeira es una bodega ubicada en Vilanova de Gaia (Portugal), junto a la zona de bodegas de Oporto, cuyos orígenes se remontan a 1850. La finca consta de tres hectáreas de jardines con árboles centenarios y un palacete del siglo XIX donde celebran eventos y con un restaurante de calidad dedicado a la gastronomía portuguesa.

Pero la popularidad de la bodega en esta zona está en la botella gigante, la más grande del mundo, (32 metros de largo por 10 de alto), que ordenaron edificar a un estudio de arquitectura, y en cuyo interior organizan distintos tipos de catas de vinos portugueses.

Fotografías: Daniel Lopez Pose