Una dieta sana y equilibrada, que sea capaz de reportar efectos positivos sobre la salud, requiere gran variedad de alimentos entre los que debe estar presente el pescado. Los pescados poseen propiedades nutricionales que los convierten en alimentos fundamentales dentro de lo que se considera una alimentación equilibrada y cardiosaludable. No sólo disponen de proteínas de excelente calidad, sino que además presentan un perfil de lípidos más saludable que el de otros alimentos también ricos en proteínas, como las carnes. Además, el consumo de pescado, y en concreto de pescado azul, puede mejorar los síntomas de algunas enfermedades y contribuir a la prevención de otras, entre las que destacan las cardiovasculares.
A pesar del conocimiento de sus beneficios, lo cierto es que menos de la mitad de los españoles (47%) se acerca a las recomendaciones de ingesta semanal de pescado. Además, no todos los establecimientos de restauración ayudan al ciudadano a elegir un menú sano y equilibrado cuando come fuera de casa.
Según un estudio realizado por la Fundación Eroski sobre 318 restaurantes ubicados en zonas céntricas de 18 ciudades: A Coruña, Alicante, Almería, Barcelona, Bilbao, Córdoba, Granada, Madrid, Málaga, Murcia, Oviedo, Pamplona, San Sebastián, Sevilla, Valencia, Valladolid, Vitoria y Zaragoza, el 30% de los menús del día suspende en calidad dietética e, incluso, la mitad de los suspendidos fueron considerados malos o muy malos desde una perspectiva nutricional y dietética.
La principal razón de que tantos menús fueran mal valorados fue la imposibilidad de elegir verdura o ensalada y legumbres como primer plato, pescado como segundo plato y fruta del tiempo como postre. Se constató que la oferta de carnes es muy superior a la de pescados cuando, al menos, deberían equipararse y que el 10% de los restaurantes (en Murcia, 38%, en Valencia el 25% y en Oviedo y Córdoba, el 20%) carecía de pescado en sus menús.
Recomendaciones generales en la alimentación fuera del hogar:
Existen diversos consejos a la hora de elegir un menú sano y equilibrado cuando se come fuera de casa. Este dossier recoge las pautas que se ofrecieron desde El Día Nacional de la Nutrición promovido por la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD).
- Variar diariamente el menú.
- Dedicar un mínimo de 40 minutos a la comida y comer despacio y masticar bien.
- Elegir un menú variado que incluya alimentos de los grupos básicos de alimentos:
- Farináceos (pasta, arroz, patatas, legumbres):
- como primer plato o como guarnición.
- Verduras y hortalizas (ensalada, enteras o en forma de puré, crema, etc):
- como primer plato o como guarnición.
- Mejor aliñadas con aceite, y no con mayonesa u otras salsas.
- Alimentos proteicos (carne, pescado, huevos):
- como segundo plato.
- Da preferencia al consumo de pescado y limitar el consumo de huevos a 2-4 unidades semanales.
- Reducir el consumo de carnes grasas o salseadas.
- Fruta y/o lácteos
- Farináceos (pasta, arroz, patatas, legumbres):
- Procurar que diariamente en el menú haya alimentos vegetales frescos: hortalizas o frutas.
- Elegir habitualmente fruta fresca como postre, alternando su consumo con el de lácteos.
- Acompañar la comida con agua, ya que es la bebida más sana para el cuerpo.
- Procurar ingerir cantidades moderadas de alimentos para evitar el exceso y compartir platos si se come acompañado o pedir raciones más pequeñas.
- Evitar cualquier tipo de aperitivo o tentempié antes de empezar a o mientras sirven la comida.
- Limitar el consumo de fritos, rebozados, empanados, guisos grasos, etc.
- No es imprescindible pedir un primer plato, un segundo y un postre. Se puede perfectamente pedir dos entrantes y un postre.