Alimentos
Se trata sin duda de un aceite gourmet, no en vano se trata de la segunda edición limitada de Primer Día de Cosecha, referente en el mundo de los productos delicatessen en el aceite de oliva extravirgen, con una botella muy especial, diseñada por el torero Enrique Ponce. La idea era que una personalidad vinculada con el mundo del aceite creará cada año la etiqueta de Primer Día de Cosecha.
Un aceite tan especial en esta segunda edición ya cuenta con una lista de espera de ventas que sobrepasa las cifras del año pasado, una muy buena noticia. Esta edición limitada del Primer Día de Cosecha Reserva se comercializa en dos variedades: Arbequino y Picual, muy distintas en sabor.
» Desde el principio tuvimos la idea de continuar Primer Día de Cosecha -un concepto único en el mundo de los extravírgenes- dándole dinamicidad e innovación al proyecto e invitando a distintos amigos amantes del aceite de oliva a interpretar la edición limitada de cada año», ha explicado Rosa Vañó, directora de Marketing y Comercial de Castillo de Canena, durante la cata y maridajes realizados con los nuevos productos en el Restaurante El Olivo de Madrid.
Primer Día de Cosecha es como un toro de lidia, por su casta, bravura, nobleza y esencia. Según ha afirmado Rosa Vañó, «nos encantó el paralelismo entre el mundo del aceite y el mundo del toro; el hombre que domina con templanza el toro y el olivar. Enrique Ponce era la persona idónea para diseñar la etiqueta de esta nueva edición por su especial vinculación con el olivar y el aceite, ya que el mismo tiene su campo en Jaén».
Por su parte, el torero Enrique Ponce -que estaba en Venezuela el día de la presenttación- ha explicado vía e-mail que ha querido sumarse a este proyecto porque «mi historia y el olivo han caminado siempre de la mano. En tierras de Jaén me fui forjando como torero, a la vez que desperté a la fascinación por los ritos tradicionales que cubren el tiempo que va desde el cultivo hasta la
extracción. Mi adolescencia transcurrió entre el culto al toro y al olivo, viendo crecer al toro rodeado de olivos. Cada primera cosecha es para mí un nuevo paseillo con la ilusión y responsabilidad intacta de querer dar siempre lo mejor de mí».
Calidad, aroma y sabor
Primer Día de Cosecha es ya un referente en el mundo del aceite de oliva extravirgen por su calidad, aroma y sabor. Tras su éxito de lanzamiento en el año 2006, esta segunda edición ya cuenta con una lista de espera que sobrepasa las ventas del año pasado. Por eso la familia Vañó -propietaria de Castillo de Canena- ha tenido que restringir a 35 el número de países en los que estará disponible Primer Día de Cosecha 2007, a la vez que se ha realizado un gran esfuerzo humano y tecnológico en la recogida.
Primer Día de Cosecha son aceites elaborados con frutos todavía verdes de las
variedades picual y arbequino. Poseen, por tanto, la vitalidad y el dinamismo de la juventud; algo agresivos pero con la suficiente armonía como para poder disfrutarlos y recrear el paladar.
Variedad Picual
De color verde intenso, tiene un frutado medio de aceituna verde y hoja, aroma fragante y bastante complejo, balsámico con toques a menta, hierbabuena y algo de cítricos. En boca de cuerpo bien estructurado y persistente, tiene un amargo y picante muy equilibrados.
Variedad Arbequino
Tiene un frutado suave de aceituna fresca, aromas herbáceos con almendra en segundo plano, y ligeros toques de frutas más maduras y frutos secos. En boca tiene una entrada elegante; es fluido y dulce al paladar, aunque progresivamente aparece un ligero picante y un amargo poco perceptible.
Con esta edición limitada se rinde homenaje a la magia del primer día de la
recolección, cuando el agricultor constata que el aceite obtenido recompensa con su calidad el esfuerzo de todo un año.
Castillo de Canena
Con una historia olivarera que arranca en 1780, la empresa toma el nombre del
castillo familiar que se alza en la loma del municipio de Canena, en la provincia de Jaén. En esta tierra de tradición olivarera, esencia de la geografía andaluza, la compañía cuenta con olivos familiares que conforman una bella finca de regadío situada a las faldas de Sierra Magina, a orillas del Guadiana Menor, en el entorno histórico de Úbeda y Baeza.Partiendo del cuidado de sus propios olivos de variedad picual y arbequina, la familia Vañó controla personalmente todo el proceso de elaboración de sus aceites de oliva virgen extra hasta que llegan al punto de venta.No dejes de probar estos exquisitos aceites.