Sanidad presenta el reglamento europeo de alegaciones nutricionales

Econsumer.es, 2 de febrero de 2007

La ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, y el presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), Félix Lobo, explicaron ayer las aportaciones que el Reglamento europeo relativo a las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos va a introducir. Según Salgado, «esta norma constituye un avance muy importante y una mejora indudable en la regulación de la publicidad y etiquetado de los alimentos».

El reglamento, que entró en vigor el 19 de enero y cuya fecha de inicio de aplicación será el próximo 1 de julio, establece las reglas que deberán seguirse por parte de la industria alimentaria para poder decir que un alimento contiene determinadas propiedades saludables -lo que se conoce como «alegación» o «declaración». Concretamente, la norma obligará a los empresarios que vendan con reclamos nutricionales tales como Light, «bajo en grasa o calorías, sal o azúcar» o «rico en vitaminas, fibra o proteínas», a que «demuestren con pruebas científicas» que sus productos poseen la sustancia beneficiosa prometida en cantidades suficientes para producir los efectos deseados y que efectivamente el alimento genera en el consumidor estos beneficios.

Asimismo, los productores que aseguren en publicidad y etiquetas que sus alimentos poseen «propiedades que mejoran la salud» de quienes los consumen deberán demostrar según el caso, que son realmente «buenos para las defensas del organismo, ayudan a reforzar nuestra salud o que reducen los niveles de colesterol».

El objetivo básico es proteger el derecho de los consumidores a recibir una información veraz sobre los alimentos que adquieren, aumentando su protección frente a informaciones confusas, exageradas o engañosas. Con este mismo objetivo, se prohíbe que un alimento pueda promocionarse como poseedor de propiedades terapéuticas o curativas y se establecen igualmente restricciones muy rigurosas en lo referente a productos destinados al público infantil.

España ha participado activamente en la elaboración de este reglamento, cuya aplicación comenzará el próximo 1 de julio en toda la Unión Europea