Agencias, 03 de Septiembre de 2006
Expertos reunidos en una Conferencia Internacional en Sidney han advertido de que el mundo está al borde de una pandemia de obesidad que amenaza con abrumar a los sistemas sanitarios de muchos países con enfermedades como la diabetes y la insuficiencia cardiaca, además de reducir la esperanza de vida de las generaciones futuras.
«La obesidad es un azote internacional», aseguró el profesor Paul Zimmet, presidente del encuentro que ha reunido a más de 2.500 expertos y responsables sanitarios. Zimmet habló ante los delegados, en la inauguración del Congreso Internacional sobre la Obesidad.
«Esta pandemia peligrosa y progresiva de obesidad afecta actualmente el mundo entero», añadió Zimmet, experto australiano en diabetes. «Es una amenaza tan grande como el calentamiento global o la gripe aviar», aseguró.
Otros expertos estimaron que el coste de los problemas de salud derivados del sobrepeso es inconmensurable a nivel mundial y asciende a miles de millones de euros anuales en países como Australia, Reino Unido y Estados Unidos.
«No nos enfrentamos con un problema científico o médico, sino con un problema económico enorme que desbordará a todos los sistemas de salud del mundo», advirtió el profesor Philip James, presidente de una asociación mundial formada por organizaciones médicas para afrontar los problemas de la obesidad.
Entre los problemas más preocupantes se encuentran las tasas crecientes de obesidad entre los niños, que los hacen mucho más propensos a enfermedades crónicas a medida que crecen, y que podrían reducir su esperanza de vida, señalaron los expertos.
Los niños de esta generación podrían ser los primeros en la historia que mueren antes que sus padres, por problemas de salud relacionados con el peso, señaló la profesora Kate Steinbeck, experta en salud infantil del Hospital Royal Prince Alfred de Sydney.
La Organización Mundial de la Salud estima que más de 1.000 millones de adultos en todo el mundo tienen un peso excesivo y 300 millones son obesos, lo que les expone mucho más a enfermedades como la diabetes, problemas cardiacos, hipertensión arterial, infarto cerebral y algunas formas de cáncer. El número de personas desnutridas en el mundo, unos 600 millones, ha sido ya superado por el número de personas obesas, según Zimmet.
La población en los países ricos está a la cabeza mundial del consumo excesivo de alimentos y de la falta de actividad física necesaria, pero quienes residen en países desarrollados de América Latina, Asia y Africa aprenden rápido los malos hábitos, señalaron los delegados.