- Aarón y Mesala Guerrero llevan años creciendo como empresarios en el sector gastronómico. Pero les faltaba la guinda, o mejor dicho, la uva, y la han encontrado gracias a la asociación con Juan Andrés Martínez, prestigioso enólogo y propietario de las Bodegas Martínez Paiva; con Luis Merino, consultor de exportación de vinos; y con el chef extremeño Juan José Benítez
- Han elegido una blanca y con acento extremeño, pues es una variedad autóctona de la ribera del Guadiana y tiene nombre de mujer. Para darle la importancia que se merece, han hecho un vino que se llama como ella y que pronto va a estar en boca de todos
Cuando alguien ama lo que hace, y además lo hace bien, siempre aprende y busca cómo mejorar, cómo crecer y ofrecer más de sí. Aarón y Mesala Guerrero, como disfrutones a la hora de beber vino que son, tenían en mente hacer el suyo propio, y tras mucho trabajo de campo, decidieron hacerlo con una uva autóctona de la ribera del Guadiana, en la provincia de Badajoz y de la mano de quienes más saben del tema: el prestigioso enólogo Juan Andrés Martínez, propietario de las Bodegas Martínez Paiva en Almendralejo, donde se elabora su primer capricho bebible; Luis Merino, que es consultor de exportación de vinos; y el chef extremeño Juan José Benítez.
Cayetana es un vino para celebrar la vida, brindar con ilusión a cualquier hora, acompañar y ensalzar cualquier plato y tomar siempre bien frío. La uva y la recién creada firma comparten nombre propio, y seguro que pronto ambos se fusionarán en uno. El vino hará famosa a la uva y la uva al vino, porque ha llegado para conquistar por su sabor y también por su estética. Su botella elegante, con una etiqueta cuidada y diseñada por la ilustradora Patricia León, muestra a una mujer, nuestra protagonista, cuyo cabello se fusiona con las ramas y hojas del viñedo, como Dafne convirtiéndose en laurel. Una pieza que queda bien en cualquier mesa y es el mejor ‘complemento’ que se puede llevar a una fiesta.
El recién llegado es un vino de la tierra que se extrae de viñedos propios plantados en Almendralejo hace más de 40 años sobre suelo franco-arcilloso y con un alto porcentaje de caleño. Cayetana es un monovarietal que en fase visual es limpio y brillante, de color amarillo limón con tonos verdes. En nariz muestra aromas a frutas tropicales, blancas y cítricos en armonía con aromas vegetales que le dan frescura. En boca es potente y redondo con un agradable equilibrio entre frescura y acidez. El que acaba de salir al mercado, la añada 2021, se vendimió a finales de septiembre, fermentando las uvas de manera controlada a una temperatura de 15º en depósitos de acero inoxidable. Tras ello, permaneció un mes en contacto directo con sus lías finas, y un 30% de la fermentación se hizo en barrica de roble francés.
Cayetana se puede comprar en su página web a través de formulario y también en la tienda física Bodegas Vinario (Calle de Canillas, 93, Madrid). Su P.V.R. es de 7’90 €.