Hidratante diaria, o cada dos días, una buena exfoliante, lavados con un jabón neutro… tus pies merecen toda la atención. Es una carrera de fondo, debes cuidarlos todos los días, para mantenerlos sanos y bonitos.
El botiquín imprescindible
Para evitar y prevenir problemas, ten siempre a mano:
- Jabón neutro.
- Toalla individual.
- Una buena hidratante específica para los pies.
- Apósitos en caso de excursiones.
- Preventivos del olor.
- Medias anti sudoración, en temporada.
- Productos relajantes.
- Por último destacar que es esencial o recomendable realizar una visita anual al podólogo.
Otros consejos generales
- Si existe tendencia a padecer hongos, hay que lavarse a diario, espolvorear bien los zapatos con productos específicos y usar siempre chanclas en piscinas y gimnasios.
- Debemos lavar los pies todos los días con jabón neutro, con agua ni fría ni caliente. Hay que secarlos muy bien, en especial en la zona de los dedos.
- Es aconsejable utilizar una exfoliante 1 o 2 veces por semana, en especial en los pies con tendencia a las durezas.
- Tratar el olor y el sudor con productos especiales.
- Lo ideal es cambiar con frecuencia de zapatos, cada 4 días como máximo conviene cambiar o intercambiar los zapatos. Hay que airearlos bien.
- Tratar cuanto antes si hay alguna rozadura.
- Utilizar productos especiales para el dolor y el cansancio.
- Hay que prestar una atención especial a los pies del diabético, porque no tienen sensibilidad al dolor y una pequeña lesión puede desencadenar un gran problema. Cualquier herida hay que limpiarla muy bien y acudir al especialista.