Los bebedores moderados de cerveza siguen el patrón alimentario de la Dieta Mediterránea.

  • Los consumidores moderados de cerveza que han participado en la investigación presentan una menor prevalencia de diabetes mellitus e hipertensión, realizan mayor actividad física y tienen un índice de masa corporal menor que los no bebedores
  • El Dr. Ramón Estruch, Consultor Senior del Servicio de Medicina Interna en el Hospital Clínic de Barcelona, ha impartido la conferencia “Bebidas fermentadas, Dieta Mediterránea y Enfermedad Cardiovascular”, que ha tenido lugar el pasado miércoles a las 12.30 h. La conferencia se ha impartido en el marco de las XI Jornadas Nacionales de Nutrición Práctica
  • Los hábitos de alimentación de los consumidores moderados de cerveza en los países mediterráneos, como España, difieren mucho de los países anglosajones, ya que siguen un patrón alimentario más próximo a la Dieta Mediterránea tradicional

Madrid, abril de 2011.- El patrón alimentario global de los consumidores moderados de cerveza es más próximo a la Dieta Mediterránea que el de los no consumidores de esta bebida fermentada. Además, la ingesta de ácido fólico, vitaminas, hierro y calcio es superior y presentan una menor incidencia de diabetes mellitus e hipertensión, así como un índice de masa corporal inferior. Éstas son algunas de las principales conclusiones del estudio “Cerveza, Dieta Mediterránea y enfermedad cardiovascular”, desarrollado por varias instituciones, como el hospital Clínic, la Universidad de Barcelona o el Instituto de Salud Carlos III. El estudio se ha expuesto el pasado miércoles a la comunidad científica en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid durante las XI Jornadas Nacionales de Nutrición Práctica.

Esta investigación, que se enmarca dentro del estudio PREDIMED, ha utilizado una muestra de 1.249 participantes con un elevado riesgo vascular, y ha analizado la relación entre consumo moderado de cerveza, factores de riesgo cardiovascular, patrón de alimentación y actividad física. Según el Dr. Ramón Estruch, “los bebedores moderados de cerveza manifestaron consumir una mayor cantidad de verduras, legumbres, pescado, cereales y aceite de oliva, todos estos productos ligados a la Dieta Mediterránea, y aseguraron realizar mayor actividad física”.

Por otra parte, el estudio ha constatado que el patrón alimentario próximo a la Dieta Mediterránea tradicional que manifestaron los consumidores habituales de cerveza dista mucho del patrón observado en el mundo anglosajón, en el que los consumidores de cerveza suelen tomar productos menos saludables, platos precocinados, azúcar, patatas fritas, embutidos, carne de cerdo o grasas poliinsaturadas.

La investigación también ha comprobado que los participantes que consumían cerveza de forma moderada referían un consumo más elevado de proteínas y carbohidratos (incluida la fibra) que los no bebedores, mientras que el consumo de grasa era el mismo. Además, los consumidores de cerveza tomaban una cantidad significativamente superior de ácido fólico, vitaminas B, E y D, así como hierro y calcio, puesto que esta bebida fermentada es rica en estos componentes.

Asimismo, los consumidores moderados de cerveza presentaron un índice de masa corporal menor que los no bebedores, sin que se hallaran diferencias en el perímetro de la cintura como medida de la obesidad visceral.

Consumo moderado de cerveza y salud cardiovascular

El estudio “Cerveza, Dieta Mediterránea y enfermedad cardiovascular” ha puesto de manifiesto que las personas que consumían cerveza habitualmente de forma moderada presentaban una menor incidencia de diabetes mellitus e hipertensión –factores de riesgo en la enfermedad cardiovascular-, así como unas cifras de HDL-colesterol mayores que los no bebedores. “Estos datos son acordes con los resultados de numerosos estudios epidemiológicos que señalan una menor incidencia de diabetes mellitus e hipertensión en los bebedores moderados y un mejor perfil lipídico con elevación de HDL-colesterol (conocido como colesterol bueno) y disminución de LDL-colesterol (colesterol malo)”, ha asegurado el Dr. Ramón Estruch.

Las enfermedades cardiovasculares están detrás de uno de cada tres fallecimientos en España y constituyen la primera causa de mortalidad. La cardiopatía isquémica (angina de pecho, infarto agudo de miocardio y muerte súbita), la enfermedad cerebrovascular o ictus cerebral y la enfermedad periférica son las patologías más comunes en España.

Una bebida natural que forma parte de la Dieta Mediterránea

El consumo moderado de cerveza (un máximo de 3 cañas para los hombres y 2 para las mujeres) puede tener efectos positivos para el organismo, siempre que se trate de individuos adultos y sanos. Está elaborada con ingredientes 100% naturales (agua, cebada y lúpulo) y es una de las pocas bebidas que contiene vitaminas y minerales de forma natural.

Por este motivo, la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) incluye en la Pirámide de la Alimentación Saludable -principal referente en material nutricional que integra todos los alimentos propios de nuestra dieta- el consumo opcional y moderado de cerveza, por supuesto, siempre por adultos sanos.

Estudio PREDIMED

La investigación, enmarcada dentro del estudio PREDIMED, es un trabajo de intervención nutricional en el que se pretende evaluar la eficacia de la Dieta Mediterránea en la prevención primaria de enfermedades cardiovasculares. El estudio PREDIMED es un gran ensayo clínico, que comenzó en 2003, aleatorizado de intervención dietética en personas con alto riesgo cardiovascular, con el objetivo principal de averiguar si la Dieta Mediterránea suplementada con aceite de oliva extra virgen o frutos secos evita la aparición de enfermedades cardiovasculares (muerte de origen cardiovascular, infarto de miocardio y/o accidente vascular cerebral), en comparación con una dieta baja en grasa. Como variables secundarias, se evalúan también los efectos de la Dieta Mediterránea sobre la mortalidad global e incidencia de insuficiencia cardiaca, diabetes, cáncer, deterioro cognitivo y otras enfermedades neurodegenerativas.

Como objetivos secundarios del estudio también se incluye la valoración de los efectos del consumo de bebidas fermentadas (cerveza y vino) sobre los factores de riesgo vascular y la incidencia de complicaciones cardiovasculares, y la identificación de aquellos sujetos con determinadas características fenotípicas y genotípicas que se benefician más del consumo de una Dieta Mediterránea tradicional y sus principales alimentos.

El equipo del estudio PREDIMED reúne a los principales grupos de investigación sobre nutrición y enfermedad cardiovascular de España.

Centro de Información Cerveza y Salud

Desde su fundación en 1998, el Centro de Información Cerveza y Salud (CICS), entidad de carácter científico que promueve la investigación sobre las propiedades nutricionales del consumo moderado de cerveza y su relación con la salud, ha querido dar respuesta a la demanda informativa existente en nuestro país en torno a esta bebida apoyando todas aquellas iniciativas relacionadas con su investigación y proporcionando a los profesionales sanitarios y la sociedad información objetiva y contrastada, bajo la supervisión de los profesionales de la medicina, la dietética y la nutrición que conforman el Comité Científico de esta entidad.