Estos tres factores son, para el quiropráctico Ata Pouramini, la clave para relacionar dolor de espalda con mortalidad prematura
El dolor de espalda no es una enfermedad. Sin embargo, lo padecen millones de personas; se calcula que el 80% de la población de todo el planeta. Este síntoma, como lo consideran las autoridades sanitarias se deriva de diversas causas, entre las que destacan la falta de higiene postural, los problemas nerviosos y diversos accidentes o percances relacionados con la espalda.
Está considerado como una de las mayores motivos de absentismo laboral y sus predicciones de prevalencia no resultan nada halagüeñas. Se prevé que, una vez aparecido, permanecerá entre el 23% y el 38% de los casos globales.
Cifras negativas, a pesar de los indudables avances en el campo de la traumatología y otras ramas de la Medicina implicadas y de la diversidad de terapias destinadas a paliarlo. Diferentes estudios achacan el incremento de la lumbalgia, la cervicalgia y otras dolencias a las nuevas formas de vida – de socialización, relación personal y trabajo – asociadas irremediablemente a las nuevas tecnologías.
La cantidad de horas que permanecemos sentados en nuestro puesto de trabajo, en posturas no siempre correctas, pero sostenidas en el tiempo, frente al ordenador, así como el uso en movimiento de teléfonos y tabletas, originan un aumento diario de consultas relacionadas con el dolor de espalda. Así lo asegura el quiropráctico Ata Pouramini, cuya consulta en Valencia se ha convertido en pocos años en la más grande de Europa en esta disciplina.
Pero no se trata de los únicos factores, sino de los últimos, los más recientes en añadirse a una cuantiosa lista. Pouramini identifica otros dos a añadir al sedentarismo: el sobrepeso y la ansiedad, como definitivos en su relación con los trastornos músculo-esqueléticos. De hecho, el experto los asocia con el último informe aparecido en prensa y que ha llamado la atención por su llamativo titular : “El dolor de espalda podría ser una señal de muerte prematura”.
Este estudio, en curso en la actualidad en la Universidad de Sidney, y que ha sido publicado por el European Journal of Pain , ha analizado la relación entre dolor de espalda y mortandad entre 2.180 parejas de gemelos mayores de 70 años. Las conclusión general es que quienes padecían dolor superaban en un 13% en índice de deceso a quienes estaban libres de él.
Para el experto, más que una relación de causa- efecto, nos encontramos ante un conjunto de aspectos interrelacionados que tienen que ver con la calidad de vida, en la que la espalda juega un papel primordial.
Los tres, antes mencionados : sedentarismo, ansiedad y sobrepeso remiten unos a otros, en un círculo viciosos que acaba con dolor de espalda y que comienza con él. La falta de actividad, unida a una alimentación calórica, grasa y alta en azúcares, nos conduce al sobrepeso. La falta de tono muscular y la carga de peso en algunas zonas de la espalda nos producen lumbalgia. Ésta nos lleva a la ansiedad, la ansiedad a la comida y la comida al sobrepeso.
Ata Pouramini
Es director de Quiropractic Valencia y autor del libro “Tú eres tu medicina.
Es orientador en salud, experto en nutrición y uno de los quiroprácticos más reconocidos . Estudió Nutrición en la Oxford Brooks University, es Licenciado en Ciencias Humanas, Master en Ciencias Quiroprácticas, Doctor en Quiropráctica y miembro de la Asociación Española de Quiropráctica.