Trucos para conseguir una tortilla de patatas perfecta
Como siempre, lo fundamental es que todos los ingredientes para una buena tortilla de patatas sean de calidad: excelentes patatas, huevos frescos y aceite de oliva. Y después, eso, mucho arte. Así conseguirás que uno de los platos favoritos de los españoles, o el preferido, resulte redondo:
- Emplea una buena sartén, antiadherente. Dicen que las mejores sartenes son las que pesan, las de hierro. Ólvidate de las del todo a 1 euro, al final ya sabes: lo barato resulta caro (en especial si arruina tus platos).
- Fríe las patatas a fuego lento y no olvides removerlas de cuando en cuando, porque de lo contrario se pueden pegar.
- Para una tortilla más jugosa, tras freír las patatas déjalas enfriar y luego las mezclas con el huevo batido.
- Ahorrarás calorías (y aceite) si pones las patatas a escurrir y enfriar en el escurrreverduras, sobre un plato. Verás cuanto aceite te sobraba.
- Nunca utilices más de 6 huevos, en caso necesario haz dos de 4 huevos, por ejemplo.
- Para que tu tortilla no se pegue, al margen de emplear una sartén antiadherente (descarta las dañadas o más viejas) conviene calentar la sartén con sal gorda.
- Mejorarás la consistencia de la tortilla si dejas reposar las patatas en el huevo aproximdamente unos 10 minutos. De ese modo se empapan más en el huevo.
- ¿Quieres una tortilla con otro sabor? Añade un chorrito de cava o sidra a los huevos batidos. Seguro que te sorprenderás.
- Para lograr una tortilla más esponjosa procura batir primero las claras de los huevos y luego rompe las yemas, también puedes separar las yemas de las claras y batir primero las claras (mejor a punto de nieve) y después añadir las yemas.
- A los huevos batidos también les puedes añadir un chorrito de leche o de cerveza.
- Las patatas más recomendables para una tortilla son: Kennebec, Monalisa, Spunta, Nagore, Maika… La mejor debe tener la piel amarilla, su carne blanca y ser poco harinosa. Observa las indicaciones de las etiquetas en las bolsas de patatas.