Polifenoles de la uva contra Campylobacter jejuni

  • Científicos del CSIC consideran que estas sustancias pueden constituir la base para desarrollar antimicrobianos naturales contra esta bacteria.

JANO.es, 28 Agosto 2008

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han descubierto que los polifenoles, compuestos presentes en la uva, el vino y otros productos vegetales, podrían ser la base para desarrollar antimicrobianos naturales contra la bacteria Campylobacter jejuni, que es el principal patógeno asociado a infecciones del intestino en todo el mundo, con síntomas como diarreas, fiebre o cólicos.

Según informa el centro investigador, el hallazgo sugiere que el aprovechamiento de los productos residuales que genera la fabricación del vino puede constituir una alternativa económica y ecológica para controlar esta bacteria, presente en alimentos, e incrementar así la seguridad alimentaria.

Los resultados del estudio, llevado a cabo Adolfo Martínez-Rodríguez, Alfonso V. Carrascosa y Mónica Gañán, del Instituto de Fermentaciones Industriales del CSIC), en Madrid, han permitido al Consejo solicitar una patente.

«El grupo de trabajo está centrado en la búsqueda de nuevas opciones para el control de Campylobacter jejuni y el empleo de productos de origen natural, como los polifenoles, representa una de las alternativas más prometedoras», explica el Dr. Martínez-Rodríguez

Para controlar la bacteria, la industria alimentaria recurría anteriormente a los antibióticos, pero la Unión Europea ha prohibido el uso de estos farmacos en la alimentación de animales, ya que eran utilizados como promotores del crecimiento.

Al parecer, los polifenoles de la uva se encuentran en las semillas del fruto y en su piel, donde se localizan en mayor concentración. Son cruciales a la hora de elaborar vino y, debido a su papel antioxidante, también se utilizan en productos cosméticos.

No obstante, según señala el Dr. Martínez-Rodríguez, las conclusiones del trabajo apuntan a que los polifenoles de otros vegetales también podrían actuar contra la bacteria. «Es la estructura del compuesto fenolítico la que determina sus propiedades químicas y biológicas y, por ende, su capacidad antimicrobiana. Con estos datos, sería posible aislar los polifenoles de otras fuentes vegetales», comenta.

Las bacterias del género Campylobacter constituyen la mayor causa de enfermedades diarreicas en el ser humano y suelen ser la principal causa de gastroenteritis bacterianas, según datos de la OMS. De las 15 bacterias que componen este grupo, Campylobacter jejuni, objeto del estudio del CSIC, y Campylobacter coli aglutinan el 95% de las infecciones.

Los síntomas más comunes de la infección incluyen fiebre, diarrea, calambres y dolor abdominal. Además, según explica el investigador del CSIC, aproximadamente uno de cada 1.000 pacientes suele desarrollar secuelas serias, como síndrome de Guilliain-Barre o parálisis aguda neuromuscular.

No obstante, explica que los datos sobre la incidencia de estas infecciones bacterianas son difíciles de cuantificar, especialmente en países en vías de desarrollo. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria cuantificó más de 176.000 afectados en 2006, 46 casos por cada 100.000 europeos. En España, en 2007, se identificaron 5.889 casos.